El agente de la policía metropolitana acusado de "homicidio en grado de tentativa" por efectuar tres disparos contra Lucas Cabello el 9 de noviembre pasado en el barrio de la Boca fue liberado por la justicia, aunque seguirá procesado, en una decisión que será apelada por la querella.
El efectivo Ricardo Ayala no recibió la prisión preventiva por el juez de instrucción en lo Criminal Osvaldo Rappa y seguirá siendo investigado, pero en libertad.
"Salió el auto de procesamiento sin prisión preventiva lo que se va a ser apelado por esta querella", señaló a Télam Nahuel Berguier, uno de los abogados de la familia de Cabello, que presentará el escrito judicial dentro del plazo legal de 72 horas.
"Vamos a apelar porque consideramos que decir que hubo un 'exceso en la legitima defensa' carece de sustento, máxime cuando el auto de procesamiento señala que Cabello no estaba armado", indicó el letrado. "Tenemos un policía armado que lo atacó de tres tiros, es claro que no es legitima defensa si no una agresión lisa y llana", apuntó.
Berguier criticó que el procesamiento hable de "imprudencia" cuando "se trata de una tentativa de homicidio y está comprobado que a Lucas le dan el segundo y tercer tiro cuando estaba en el piso".
El abogado, que junto a su socia Gabriela Carpineti componen la querella, manifestó además que "del expediente surge con claridad que hubo un intento de entorpecer la investigación por parte de la Policía Metropolitana, por lo cual vamos a pedir que se revoque la orden de liberarlo al tratarse de un delito de tal gravedad".