El presidente ruso Vladimir Putin acusó a Turquía de derribar un avión destinado al bombardeo del Estado Islámico en Siria para despejar el paso del petróleo que el grupo calificado como terrorista por el resto del mundo le vende al Estado turco presidido por Recep Tayyip Erdoğan, socio de la OTAN.
El gobernante detalló que los últimos datos que maneja Rusia confirman que "el crudo llega en cantidades industriales desde los lugares de extracción de petróleo controlados por el Estado Islámico hasta el territorio turco".
El Estado Islámico tiene entre sus principales fuentes de financiamiento el petróleo de los pozos en actividad dentro del territorio ganado a Siria e Irak. Por ser terroristas, su actividad comercial está condenada a canalizarse por traficantes que trabajan a nombre de empresas o países que terminan recibiendo los recursos naturales sirios e iraquíes en manos de terroristas. A 10 dólares el barril promedia el petróleo del EI, contra los cerca de 50 dólares que cuesta en el mercado blanco.
"Tenemos razones de peso para creer que el avión ruso fue derribado para proteger los suministros de petróleo del Estado Islámico", declaró este lunes el presidente Putin en el marco de la Cumbre del Clima que reúne a un centenar y medio de mandatarios mundiales en París, adonde los líderes de las potencias están más dedicadas a las reuniones paralelas destinadas a militar y planificar los bombardeos a Siria e Irak, mientras se define si hay una incursión por tierra de las fuerzas del bien encabezadas por Estados Unidos contra el mal encarnado por el Estado Islámico.
"Siempre hemos votado por ello", aseguró el presidente de Rusia, Vladímir Putin, cuando le preguntaron si Moscú está preparada para crear una amplia coalición antiterrorista. Sin embargo, el líder ruso advirtió que "esto no se puede conseguirlo mientras alguien emplee a organizaciones terroristas para conseguir objetivos a corto plazo".
Las autoridades de Rusia consideran que el bombardero Su-24 fue derribado para proteger los suministros ilegales de petróleo del Estado Islámico a Turquía.
