En las vísperas a una definición de la Cumbre del Clima que se desarrolla en París, el papa Francisco reveló que está atento a lo que se debate en el cónclave que tuvo a 150 presidentes presentes en las deliberaciones. Pidió una salida que contemple el fin de la pobreza y la solución al calentamiento global.
"Sigo con viva atención los trabajos de la Conferencia sobre el clima que se desarrolla en París, y me viene a la mente una pregunta que he escrito en la Encíclica Laudado Si", aseguró el Sumo Pontífice durante el Angelus de este domingo en Plaza San Pedro, el último antes del Jubileo de la Misericordia que iniciará el próximo martes 8.
"¿Qué tipo de mundo deseamos transmitir a todos los que vendrán después de nosotros, a los chicos que están creciendo?", se preguntó el Obispo de Roma, que dio su habitual mensaje dominical en medio de fuertes operativos de seguridad en la Plaza, con vistas al inicio del Año Santo.
"Por el bien de la Casa Común, de todos nosotros y de las futuras generaciones, cada esfuerzo en París debe servir para atenuar los impactos del cambio climático y al mismo tiempo luchar contra la pobreza y hacer florecer la dignidad humana", demandó el Papa argentino, que insistió: "las dos cosas van juntas, frenar el cambio climático y luchar contra la pobreza".
"Rezamos para que el Espíritu Santo ilumine a los que están llamados a tomar decisiones tan importantes y les dé el coraje de tener siempre como criterio de selección el bien mayor para la entera familia humana", agregó Francisco.
En la Plaza San Pedro, mientras tanto, debutaron los controles de seguridad con escáneres y detectores de metales que se usarán para "todos" los fieles y peregrinos que a partir del próximo martes deseen atravesar la Puerta Santa de la Basílica, que a las 9.30 de Roma del 8 de diciembre dejará abierta Bergoglio hasta el próximo 20 de noviembre.