Con una carta enviada a “trabajadores, compañeros y amigos de la industria audiovisual”, Lucrecia Cardoso anunció su alejamiento del cargo de presidenta del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, que ocupaba desde enero de 2014.
Cardoso, que comenzó su labor en el Incaa en el área de Acción Federal y luego como vicepresidenta, fue la cuarta funcionaria al frente del organismo desde 2003, gestión iniciada por Jorge Coscia, más tarde diputado y finalmente Secretario de Cultura, Jorge Alvarez y Liliana Mazure, que dejó el cargo para desempeñarse como diputada nacional.
En el texto, Cardoso asegura que “juntos hemos recorrido un camino de crecimiento, de aprendizajes, de encuentros, de mucho trabajo, de importantes desafíos, compartiendo largas jornadas de debates, de producción, articulando mucho para lograr objetivos cada vez más grandes”.
“La cantidad de películas producidas cada año, la cantidad de espectadores de cine y especialmente de nuestro cine, los Espacios Incaa y los cinemóviles ganando volumen y presencia, los festivales, muestras y semanas de cine argentino en el mundo entero, las salas que se digitalizaron, las nuevas producciones para televisión, los mercados, el canal del cine argentino, la escuela, ahora más federal y hermosa que nunca, el VOD y lo federal en el centro de la escena, entre otros tantos hermosos logros compartidos”, señaló.
“Dos sensaciones me invaden en estos momentos por sobre tantas que afloran, el orgullo de haber sido parte y el agradecimiento por lo compartido. A ustedes como un colectivo protagonista que se refleja en cada sonrisa de un argentino que encuentra en las pantallas una mejor propuesta de producción nacional; a Néstor Kirchner, que nos convocó a este sueño que al principio parecía imposible, a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, por todo”, agregó.
“A los trabajadores y compañeros del Incaa, porque sin cada uno de ellos nada hubiese sido posible, a los trabajadores organizados del Estado y del sector, a los empresarios y sus cámaras y asociaciones, motor de esta pujante industria, a los amigos y colegas de otras áreas del Gobierno, de otros sectores e instituciones, de países vecinos y hermanos, del mundo entero, que recibieron con entusiasmo al cine y audiovisual argentino para escribir juntos esta importante hoja de su historia, les dejo un gran abrazo y los mejores deseos”, concluyó.