Diego Lagomarsino, el colaborar que le prestó a Alberto Nisman el arma que le provocó su muerte, apeló este lunes la decisión de la jueza en lo criminal Fabiana Palmaghini de enviar el expediente al fuero federal, según consignó la agencia DyN. La decisión de la magistrada implica la creencia de que al fiscal de la causa AMIA lo asesinaron. Hasta ahora, para la Justicia ha existido la duda entre esa hipótesis y la del suicidio, que es avalada por la carga probatoria de las pericias practicadas por los expertos de la Corte Suprema.
La apelación debe ser resuelta por la Cámara del Crimen, que deberá fijar una nueva fecha de audiencia para tratar el tema y luego decidir. Los camaristas podrían revocar el fallo de la jueza y devolverle el caso, o confirmarlo y enviar la causa a la Justicia Federal.
Tras la extensa declaración del ex espía Antonio Jaime Stiuso -en la que aseguró, sin pruebas, que Nisman fue asesinado por la denuncia que presentó contra la ex presidenta Cristina Kirchner-, Palmaghini se declaró incompetente para seguir a cargo del expediente y decidió que el caso pase al fuero Federal.
La decisión de la magistrada podía ser apelada por Lagomarsino, el único imputado en la causa, y por la fiscal Viviana Fein. Fein no apeló porque su superior ante la Cámara del Crimen, Ricardo Sáenz, ya presentó un dictamen en el que apuntala la teoría del homicidio por sobre la del suicidio y pide el pase al fuero federal.
Lagomarsino declaró que entregó a Nisman un arma la noche antes de su muerte por pedido del ex titular de la UFI AMIA. Nisman también había consultado con un custodio la posibilidad de hacerse de un arma por temor a su seguridad.
El fiscal fue encontrado muerto por un balazo disparada por el arma de Lagomarsino el 18 de enero del año pasado en el baño del departamento que alquilaba en las Torres Le Parc, de Puerto Madero, en la Ciudad de Buenos Aires.