Audiencia por la Ley de Medios en la CIDH: los representantes de Macri dijeron en Washigton que en el kirchnerismo hubo periodistas "hostigados y encarcelados" y persecución contra Clarín

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En Washington, se realizó este viernes en la CIDH una audiencia pública en la que el Gobierno de Argentina y referentes de la sociedad civil, académicos y el CELS expusieron el panorama de la situación comunicacional del país tras la eliminación de la Ley de Medios vía DNU. Referentes del macrismo, en tanto, aseguraron que durante el kirchnerismo hubo periodistas "hostigados y encarcelados" y una campaña de persecución contra el diario Clarín, perteneciente al holding homónimo.

El primero en tomar la palabra fue el periodista Horacio Verbitsky en nombre del CELS, quien repasó el proceso vivido en el país con el debate por la Ley de Medios, debatida en múltiples ámbitos sociales. "El impacto de la anulación por decreto ha sido muy amplio, y las expectativas en esta audiencia son también muy altos", señaló.

"Hay una política de hechos consumados que habilita una mayor concentración. La compra venta de licencias como si fueran mercancías que no tuvieran relación con el debate de ideas y la circulación de información reduce el pluralismo y la diversidad y niegan el derecho a la comunicación a vastos sectores", remarcó. "Estas decisiones benefician a las grandes empresas en detrimento de las pequeñas y las que no tienen fines de lucro", agregó.

Martín Becerra, especialista en concentración de comunicación, fue el siguiente en exponer, y señaló que debe ser política de estado generar políticas que restrinjan la concentración de medios, como tiene el país: 40% de licencias de televisión abierta están en manos de dos grupos, en la tv cable (por el cual el 83% de la población accede a contenidos) 70% de abonados está controlado por dos grupos, ejemplificó. Dijo que la política del actual gobierno tiene "efectos regresivos" y que combina "discrecionalidad de mercado" con "discrecionalidad del poder ejecutivo".

La audiencia del CIDH fue solicitada por un conjunto de organizaciones integrantes de la Coalición por una Comunicación Democrática (CCD): Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) / Universidad Nacional de Lanús (UNLa) / Universidad Nacional de las Artes (UNA) / Carrera de Ciencias de la Comunicación, Universidad de Buenos Aires (UBA) / Red de Carreras de Comunicación Social y Periodismo de Argentina (REDCOM) / Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) / Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO) / Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica (ALER) / Red de Radios Universitarias de América Latina y el Caribe (RRULAC) / Asociación de Radiodifusoras Universitarias Nacionales Argentinas (ARUNA) / Sistema Integrado de Radios de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) / Trayecto de locución (Convenio AFSCA UNER) / Sindicato Argentino de Televisión (SATSAID) / Coalición por una Comunicación Democrática (CCD) / Músicos Autoconvocados / Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos / Red Par / ARBIA

Exposición del Estado

Por el macrismo tomó la palabra en primer lugar Claudio Avruj, secretario de DDHH. "En los últimos seis años nuestro país atravesó restricciones en materia de libertad de expresión. El año pasado fue crítico parta el ejercicio del periodismo en la Argentina: periodistas hostigados y encarcelados, constantes abusos de las cadenas nacionales y del sistema público de medios, y distribución arbitraria de la pauta", señaló Avruj.

El funcionario ponderó entre los logros del macrismo que "el presidente ha dejado de usar la cadena nacional como elemento de propaganda y paralelamente ha abierto las puertas a los periodistas, hecho casi inédito en la última década en la Argentina. En tres meses de gestión se ha logrado normalizar la relación con el periodismo".

Luego habló en nombre del estado argentino Santiago Cantón, secretario de DDHH de Buenos Aires. "Queremos observar en qué contexto ocurren las violaciones a la libertad de expresión y a los Derechos Humanos". El primer ejemplo que eligió Cantón fue "uno de los más emblemáticos casos de persecución, pero no el único, fue la campaña durante años hacia uno de los diarios de mayor circulación encabezada por el presidente y seguida de forma grotesca por la gran mayoría de los funcionarios. El último ejemplo fue hace un año cuando el ex jefe de Gabinete rompió ante la prensa páginas de este diario".

El segundo ejemplo que usó el funcionario fue el exilio de Damián Patcher, quien anunció que se iba del país por intimidaciones -fue quien confirmó la muerte de Nisman vía Twitter- y luego desde la casa Rosada se difundió información sobre sus vuelos. Episodios denunciados por Nicolás Wiñazky y Jorge Lanata, ambos del grupo Clarín, fueron expuestos también por funcionarios macristas como ataques a la prensa por parte del kirchnerismo.

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