La Cámara de Diputados rechazó este miércoles mediodía un pedido del Frente de Izquierda para tratar una citación del presidente Mauricio Macri al Congreso para dar explicaciones sobre la participación en el directorio de al menos una sociedad offshore involucrada en el caso conocido mundialmente como Panama Papers. El resultado de la votación fue 131 a 89 (16 abstenciones) en contra del planteo de la diputada del PTS Miriam Bergman, que incluyó además pedidos para tratar de urgencia una serie de medidas para la protección de los trabajadores ante los despidos, suspensiones y la precarización.

La sesión se inició 45 minutos después de lo previsto, tras un planteo del titular del Interbloque Cambiemos, Mario Negri, que pidió demorar 30 minutos el comienzo del plenario porque no se había reunido el quórum para arrancar el debate.

Si bien el plenario fue convocado para avalar la designación de tres auditores de la AGN propuestos por el Frente para la Victoria, el Frente Renovador y el interbloque Cambiemos, y tratar un conjunto de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) firmados por Macri, la sesión se inició con una fuerte polémica por la mención de Macri en los Panamá Papers y los despidos que se aceleraron desde diciembre en la órbita pública y privada.

"Ajuste butal"

“No se puede ocultar el sol con las manos. Los diarios del mundo hablan de cómo el presidente está involucrado en las sociedades off shore, esa noticia tienen en vilo a la sociedad. La Argentina está viviendo un brutal ajuste. Por eso pedimos que se discuta en el recinto la prohibición de despidos y suspensiones en vez de esta vergonzosa sesión, en la que se discutan los DNU del verano que permitieron a Macri gobernar de forma ilegal”, advirtió Bregman para justificar su planteo.

Desde el Partido Obrero, Néstor Pitrola también reclamó que comparezca el presidente ante la Cámara de Diputados para “que dé explicaciones por sus empresas off shore y que esta cámara tenga el total de las actuaciones para conocer el conjunto de la información”.

En la misma línea, el presidente de bloque del Frente para la Victoria, Héctor Recalde, pidió una cuestión de privilegio para denunciar un “ataque a las condiciones de vida de todos los ciudadanos”, al sostener que “los despidos, suspensiones y tarifazos aquejan a todos” y advirtió que “las decisiones de este Gobierno son para los ricos”.

El presidente del interbloque macrista, Mario Negri, pidió ser más responsables en los pedidos a la oposición. Argumentó que para romper el protocolo se requieren consensos altos, de hasta tres cuartos de los presentes en la sesión, por lo que los planteos opositores no tenían ninguna posibilidad de tratamiento. Ergo: hacer esos planteos no es serio para el oficialismo porque el único efecto es mediático.

Para la oposición sin fuerza de votos para cambiar leyes, como la izquierda, los planteos en las sesiones, aunque no tengan peso fáctico, tienen valor testimonial y de línea de acción para las militancia de base.