La militancia impidió la detención de Hebe de Bonafini, de 87 años, dispuesta por el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, quien ordenó la captura de la titular de Madres de Plaza de Mayo con la intención de indagarla en el marco de la causa Sueños Compartidos. "Macri pará la mano", sostuvo Bonafini al final del trayecto y luego de algunos discursos de quienes la acompañaron.
La dirigente se negó a presentarse ante el requerimiento judicial porque consideró que ya había dado todas las explicaciones que debía sobre el caso.
La Madres quedaron en la mira judicial por los manejos de Sergio Schoklender mientras administró los fondos de un programa que construyó casas para necesitados a cargo de la entidad.
Martínez de Giorgi apuró una orden de detención este jueves, después del mediodía, cuando Hebe debí ir a la Plaza de Mayo a cumplir con la tradicional ronda de las Madres que se desarrolla ininterrumpidamente desde que gobernaba la dictadura genocida, responsable de un plan sistemático para desaparecer personas y robar bebés nacidos en cautiverio de mujeres detenidas de forma ilegal.
Un batallón de policías federales fue enviado a la sede de la Asociación Madres de Plaza de Mayo por el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, para cumplir con la captura de la presidenta de la institución.
Los uniformados fuertemente armados no lograron su cometido debido a la gran cantidad de militantes que se interpusieron entre ellos y la líder de las Madres. La militancia se multiplicó con el correr de los minutos.
Ante la presencia de una multitud de uniformados, miles de militantes escoltaron el vehículo que trasladó a la dirigente hasta la Plaza de Mayo para cumplir con el histórico ritual de los jueves. Y luego continuaron con la "custodia" de la titular de las Madres en el regreso del vehículo hasta la sede de la entidad.
La militancia, en su mayoría provenientes de sectores kirchneristas, se comprometió a permanecer en vigilia en frente al edificio de las Madres para asegurar que Hebe de Bonafini no sea capturada durante la madrugada.
Una vez que la dirigente y las miles de personas que se volcaron a las calles a custodiarla concluyeron el acto improvisado en la puerta de la sede de las Madres, trascendió desde los tribunales de Comodoro Py, adonde tiene el despacho el juez que pidió la captura, que la orden de detención quedaría pendiente para cuando se dieran las condiciones materiales para ejecutarla. De ahí la decisión de la militancia de quedarse en vigilia junto a Bonafini.
Martínez de Giorgi resolvió también dictar una prohibición de salida del país para la titular de Madres de Plaza de Mayo, quien contó en una entrevista con C5N que tiene previsto viajar a Mar del Plata, el viernes.
Al final de la charla con el conductor Víctor Hugo Morales, Hebe de Bonafini sostuvo que Mauricio "Macri es el Chirolita de Clarín" al referirse al pedido que hizo antes: "Macri pará la mano". Concluyó: "Lo dije porque se les está yendo la mano".