El Senado aprobó el pliego de Alejandro Gullé para ocupar la Procuración General de la Suprema Corte, con una sola bola negra contra 34 blancas en la votación secreta que celebró este martes la Cámara Alta.
Asesor ad-hoc del gobernador Alfredo Cornejo desde mucho antes de que el radical asumiera la Gobernación y cultor de un perfil identificado con la mano dura en la interna judicial, aunque siendo un moderado dentro de su grupo de cercanía, Gullé dejará su despacho en la Sexta Cámara del Crimen para comandar el Ministerio Público.
Cornejo lo designó como si fuese un ministro de su gestión, con una misión específica dentro de su plan de seguridad. Gullé negó que esas circunstancias lo condicionen en el ejercicio de su futuro trabajo.
Nadie objetó las condiciones de Gullé para ir a la Procuración, al contrario, tuvo apoyos de las dos puntas de la militancia en el mundo jurídico. Desde la entidad de defensa de los derechos humanos Xumek hasta el Colegio de Abogados, pasando por decenas de otras asociaciones, expresaron su apoyo al juez para que sea Procurador en el proceso abierto a la opinión general dentro del trámite de nombramiento del cargo.
En la arena política tampoco tuvo objeciones más allá de las que plantó la izquierda, sector del arco político provincial que propicia una ruptura del sistema de selección de jueces vigentes para ir hacia uno con elección popular y caducidad temporal de mandatos.
Gullé desembarcará en la Procuración con un incendio en ebullición luego de la crisis que fue creciendo en los últimos años bajo el mando de Rodolfo González, quien deja el cargo en medio de un caos inocultable en el Ministerio Público.
Tras la votación, la Cámara Alta votó a favor de Gullé y es el nuevo Procurador de la Suprema Corte #MartesDeSesión pic.twitter.com/1ieBWm8yE0
— Prensa Senado (@prensasenado) 30 de agosto de 2016
