El Indio Solari levantó la voz para apoyar la causa en defensa de los jóvenes amenazados por la Prefectura que actúa en la Villa Zabaleta de Barracas. Por razones de salud se excusó de estar en la convocatoria masiva que se realizó para poner en la escena la necesidad de proteger la vida de personas amenazada por la fuerza de seguridad dependiente del gobierno de Mauricio Macri.
En la tarde del jueves, integrantes del colectivo La Poderosa, que edita la revista La Garganta Poderosa, junto con referentes sociales y de derechos humanos como Nora Cortiñas, Horacio Verbitsky y el padre Toto, encabezaron un masivo acto en la esquina de Iguazú y Oslvaldo Cruz, en la villa 21-24, con duros cuestionamientos a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y a los medios de comunicación.
Solari, desde su lugar y sabedor del peso de su opinión, sumó fuerza a la campaña destinada a erradicar los maltratos hasta la muerte de los "objetivos en rojo" de la agenda de la seguridad interior. Fue entrevistado por el periodista Ignacio Levy, editor de La Garganta Poderosa.
"Siempre hubo torturas, en algunas épocas menos y en otras más. He vivido en carne propia cómo se siente", cuestionó el artista mientras se refería al caso de dos menosres torturados que fue expuesto en televisión por uno de ellos, que luego de aparecer ante las cámaras fue perseguido con armas por prefectos cuando volvió a su casa.
[iframe src="https://www.facebook.com/plugins/video.php?href=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2F213440425391495%2Fvideos%2F1177958548939673%2F&show_text=0" style="border:none;overflow:hidden" scrolling="no" frameborder="0" allowTransparency="true" allowFullScreen="true"][/iframe]Solari puso el foco en la administración del Estado nacional para dimensionar el significado del ataque sufrido por dos adolescentes en la villa a manos de un grupo de prefectos. Siete fueron detenidos e imputados no bien se realizó la denuncia, y dados de baja de la fuerza, según confirmaron fuentes del Ministerio de Seguridad en consonancia con la realización del acto en el teatro de operaciones de los torturadores con uniforme contra la población bajo su custodia.
"No es un gobierno que esté pendiente de la gente, es un gobierno de CEOs, de empresarios", dijo el cantante del clásico Teatro Antidisturbios.
"Ven todo de otra manera, ven estadísticas y cifras que tampoco les están ayudando mucho. Esa gente no va a pensar nunca en ustedes. Creen que ustedes son un peligro y el peligro lo generan ellos sometiéndolos a circunstancias sociales difíciles de sobrellevar", agregó.
Transcripción del mensaje del Indio, por La Garganta Poderosa
"Torturaron a un pibe que, pobrecito, se habrá llevado el susto de su vida. No puedo imaginarme cómo debe ser tener 15 años y vivir durante horas toda esa humillación dolorosa y espantosa. Cuidado. Hay que tener mucho cuidado, cuando estas cosas empiezan a reflotar. Yo sé muy bien, porque los conozco, que ustedes atraviesan con frecuencia situaciones similares y también sé que no debe ser nada fácil tomar la decisión de contarlo públicamente, como lo hizo Iván. Hacen falta unos cojoncitos bien grandes, para decir eso ahí, donde aún habita la Prefectura, porque probablemente los trasladen a estos pelotudos, hijos de puta. Y aun así, vengan otros en su reemplazo.
"No es fácil, no es sopa, porque estás controlado por la misma gente que te verduguea, pero tuvieron esa valentía y por eso decidí comunicarme con ustedes para decirles que los admiro, los admiro por esta lucha y por esa revista estupenda que publican, donde salió la mejor nota que me hicieron en la vida, porque fue profundamente genuina. Seguramente por eso, me sentí tan cómodo como nunca antes en un reportaje. Y desde ese día, me siento vinculado con ustedes y el compromiso que significa representar las problemáticas del barrio. Ustedes hablan de todo eso que no se habla.
"Va mi apoyo y mi afecto sincero, para toda La Poderosa, para Ezequiel y para Iván, que me conmovió por su coraje, tanto como me conmovió su padre que respondió con la palabra exacta, cuando le preguntaron qué sentía: impotencia. Sí, impotencia, porque te cuesta la vida defender a tu hijo. Y la impotencia, para un padre, es algo muy jodido.
"Desde acá, quiero mandarles un gran abrazo y hacerles saber que no puedo ir, porque lamentablemente no estoy en mi mejor versión de salud, pero estoy con ustedes, apoyando a la distancia el acto en el barrio. Ojalá muchos otros chicos se atrevan a denunciar estas prácticas hasta que se visibilicen las cosas como son: esto pasa y pasa cotidianamente, aunque la gente lo vea presentado en la televisión como si fuera un caso aislado.
"Cuando un gobierno da piedra libre a la Policía para que haga lo que quiera, se pone difícil la vida, pero especialmente la vida de ustedes. No dejo de pensar en la tremenda injusticia que padecieron los pibes, cuando ese uniformado les cuestionaba si ellos podían o no podían tener una campera así… ¿Qué carajo les importa? ¿Cómo pueden inquirir a un chico de esa manera?
"Siempre hubo torturas, en algunas épocas menos y en otras más. He vivido en carne propia cómo se siente estar en ese lugar, porque me dieron picana dos veces en la misma noche, mientras los presos pasaban a ver quién era yo, que estaba ahí por averiguación de antecedentes. Me salvó uno de ellos, cuando me dijo que no tomara agua porque me provocaba una electrólisis. Y por eso digo que sé cómo se siente la humillación de ver cómo hacen con vos lo que quieren. Porque sí, visité presos políticos muchas veces, pero también presos comunes, para poder entender que todo preso es político.
"Ahora, que la ministra de Seguridad y el secretario de Derechos Humanos no hayan dicho nada todavía en relación a Iván y Ezequiel, se explica únicamente por el gobierno que hay. Cambió la mano, pero no es una mano que esté pendiente de la gente con más complicaciones. Es un gobierno de CEOs, de empresarios, que ven absolutamente todo de otro modo: ven estadísticas y cifras, aunque tampoco en eso les está yendo bien. Pero olvídense, esa gente no va a pensar nunca en ustedes, de manera generosa o respetuosa, porque creen que ustedes, los villeros, son un peligro. Y el peligro lo generan ellos, sometiéndolos a circunstancias sociales tan difíciles de sobrellevar, mientras vemos la tele gratis, porque les sirve para vender cosas.
"En síntesis, transmitirles la envidia que siento por todos los que hoy responderán a esta convocatoria, lo suficientemente sanos como para trasladarse hasta ahí y poder vociferar junto a ustedes. A mí, la vida me está cobrando los excesos y hay que pagar la cuenta en algún momento, cuando uno ha disfrutado tanto. A diferencia de los escritores o artistas que siempre acusan algún trauma de la niñez,a mí me tocó crecer feliz desde mi infancia hasta mi alocada adolescencia. Y también en las vivencias extraordinarias que tuve después, pero ahora esta enfermedad de mierda me está jodiendo la vida...
"Bienvenido este acto por los chicos, que puedo imaginar multitudinario, porque si no fuera así, sería una vergüenza.
"A ustedes, todo mi cariño".
Indio.