En una sala abarrotada por representantes de organizaciones e instituciones, un plenario de comisiones de Seguridad Interior, Legislación Penal y Salud de la Cámara de Diputados debatió por primera vez la legalización del uso medicinal del Cannabis.
El proyecto obtendrá dictamen favorable la semana próxima, tras la ronda de consultas, dado que la oposición en pleno presionó para avanzar pronto con la media sanción.
“Se termina el año legislativo y esto no puede seguir dando vueltas”, advirtió Myriam Bregman, del PTS, y en el mismo sentido Victoria Donda (Libres del Sur) pidió “no estirar el tema en términos parlamentarios”.
Al iniciar la reunión, los diputados Nilda Garré (FpV), Sergio Wisky (Pro) y Cecilia Moreau (Frente Renovador), además de Donda y Bregman, cuestionaron que la Comisión de Seguridad Interior –en manos del radical Luis Petri- sea la cabecera del debate, y exigieron enfocar el tema desde la salud pública.
"Estamos cumpliendo con un compromiso, no hay voluntad de dilatar el tema", garantizó Petri, quien fustigó a los sectores kirchneristas que promueven la propuesta al apuntar que "desde 2003 que estaba presentado" el tema a través de distintas iniciativas.
“No estamos discutiendo el uso recreativo de la marihuana”, aclaró la titular de la Comisión de Salud, Carolina Gaillard, del Frente para la Victoria.
La legisladora advirtió que “hoy no se puede investigar en nuestro país porque conseguir la sustancia está penalizado”, y a su vez “la mamá que cultiva es considerada una delincuente”.
“Hoy el Estado, en lugar de estar ayudando y acompañando a los pacientes que necesitan el Cannabis para mejorar su calidad de vida, sigue convalidando la actual Ley de Estupefacientes”, sostuvo Gaillard.
De cara al dictamen final, el oficialismo estaría dispuesto a aceptar que el Estado se comprometa a proveer el aceite de Cannabis, pero no autorizaría el autocultivo, que exigían diputados como Diana Conti, que discutió fuerte con Petri.
Testimonios de madres y médicos
Andrew Blake, director de Salud Mental del Ministerio de Salud; y Silvia Kochen, jefa del Centro de Epilepsia del Hospital Ramos Mejía e investigadora del CONICET, coincidieron en señalar que es acotada la financiación de ensayos clínicos por parte del Ministerio, ya que la mayoría de las investigaciones son de laboratorio.
A continuación, Marcelo Morante, de la Universidad Nacional de La Plata, consideró que “no nos podemos olvidar de la educación médica”. “Somos los médicos los que tenemos que estar capacitados”, dijo.
Muy aplaudido, el especialista indicó que “lo que falta es que los legisladores den un marco regulatorio”.
Uno de los testimonios más sentidos fue el de la madre de un niño autista que cultiva sus propias plantas en su casa a riesgo de infringir la ley vigente: "El uso del cannabis mejora todas las encefalopatías, lo hemos visto con nuestros hijos. Mi hija pasó nueve años con los brazos moreteados por los golpes que le daba su hermano. Las otras drogas provocaban aislamiento, agresividad, insomnio, autoagresión", señaló la mujer.
"Yo hoy no puedo llamar a la policía si me violan por que tengo treinta plantas en mi casa. Y a los que me vengan a decir que esto es un tema de seguridad, les digo que es inaceptable que trasladen dificultades de las fuerzas de seguridad a nuestros hijos que están sufriendo", agregó.
Integrante de la ong Mamá Cultiva, señaló que desde que abrieron su página en Facebook en seis meses recibieron más de 20.000 consultas de personas que necesitan usar cannabis para sus patologías: "Gente con esclerosis múltiple, fibromialgias, mucha gente con cáncer, esto no para. Esto quiere decir que hay millones de personas que necesitan usar cannabis medicinal. La planta de cannabis es medicinal per se, no tiene otro uso que no sea el medicinal".
Por su parte, en un duro testimonio, María Laura Alasi relató cómo fue que se convirtió en la primera en conseguir autorización oficial para importar aceite cannábico para el tratamiento de su hija Josefina, quien padece epilepsia.
Hasta ese momento, comentó, elaboraba el aceite por cuenta propia. “No dudé un segundo en ser yo misma quien cultivara las plantas, ante el temor de ir presa”, manifestó.
A su vez, se preguntó: “¿Ustedes, los legisladores, recorrieron los pasillos de los hospitales? Es un rotundo ‘no’, porque sino ya se estaría aplicando la ley para uso medicinal del Cannabis”.