Empresarios, funcionarios, legisladores, gremialistas y un cura compusieron la denominada mesa de diálogo que se montó el lunes para conformar una demostración de independencia del massimo frente al gobernador Alfredo Cornejo. Todos coincidieron en que lo mejor es el diálogo, pero al finalizar la primera reunión quedó en claro que no hay diálogo porque las posturas en cuestión son irreconciliables.
El massismo condicionó su participación legislativa en el tratamiento del ítem aula de Cornejo a que se abriera una mesa de diálogo sobre la cuestión. Este martes se dio cumplimiento a la formalidad y el miércoles sería aprobado en Diputados el decreto de Cornejo que cambia la estructura salarial de los trabajadores de la educación con la incorporación del ítem aula, que discrimina entre los trabajadores que dan clases y los que no en el otorgamiento de actualización de salarios.
El tema de urgencia para el Gobierno es la definición salarial en el ámbito de la Educación. El gobierno va a insistir con el ítem aula y la docencia representada en la mesa paritaria por el SUTE insistirá en el rechazo, hasta el final de los días. "La paritaria está cerrada para la cuestión salarial", reafirmó el ministro de Gobierno, Dalmiro Garay, al final del encuentro que tuvo lugar en la Legislatura.
El SUTE planteó el dictado de la conciliación obligatoria por parte de la Subsecretaría de Trabajo ante la invalidación del debate a favor de la imposición del decreto, que si no es convalidado este miércoles sería inútil para las liquidaciones salariales correspondientes a marzo. El gobierno no convalidará la conciliación porque ha decidido ir por la aprobación del decreto que regla los salarios de los trabajadores de la educación.
[iframe_galeria src="https://www.flickr.com/photos/javierpolvani/sets/72157666086368542/player"][/iframe_galeria]El massista Guillermo Pereyra fue el causante de la demora en la aprobación del decreto de Cornejo que modifica la estructura salarial de los educadores con la incorporación del ítem aula. Pereyra es secretario general del Centro Empleados de Comercio y en ese rol muñequeó su posición frente a la política salarial de Cornejo con los estatales. Y usó el método de Sergio Massa para jugar según los planes de Mauricio Macri, aunque dejando su marca.
Pereyra volteó la sesión del lunes, en la que Cornejo tenía previsto aprobar el decreto para los docentes, el primero de una serie que tiene planeados para cerrar la mayoría de las paritarias del Estado como la del SUTE, con la declaración de fracaso y la acción unilateral por medio de un decreto. El gobernador se había asegurado de entrada que gesto del sindicalista de Massa no tuviese más de dos días de costo. Y al parecer lo consiguió: el miércoles se reunirá la Cámara de Diputados para sesionar por el decreto del ítem aula. El oficialismo tiene 25 diputados -22 radicales, un demócrata, un macrista y un massista-, el peronismo tiene 19 y la izquierda, 4. Para sesionar, la Cámara tiene que tener 25 diputados sentados en sus bancas (quórum).
Para aprobar el decreto es necesaria la mayoría simple. Pereyra aseguró este lunes que el miércoles estará sentado en su banca cuando el presidente de Diputados, Néstor Parés (UCR), de por iniciada formalmente la sesión. Eso aseguraría el quórum, con lo que cual se abriría el escenario al debate antes de ir a la votación. Y, en esa instancia, aunque votara Pereyra en contra del decreto el mismo quedaría aprobado, ya que en caso de empate define el presidente del cuerpo.
La sesión será acompañada desde el exterior por cientos de docentes, que están llevando adelante una vigilia frente a la Casa de las Leyes desde mediados de la semana pasada.
Al mismo tiempo que está pautada la reunión de los diputados para votar el ítem aula, los delegados de los docentes darán sus discusiones por departamentos para fijar las posturas para el próximo plenario de delegados provinciales que tratará la continuidad del plan de lucha que ya tuvo tres paros con movilizaciones. Mientras tanto, el 4 de abril hay un paro convocado por CTERA a nivel nacional por la situación de Mendoza y otras provincias.
