Mas de 15 mil mujeres, niñas, travestis, transexuales y lesbianas danzaron , cantaron, gritaron y se abrazaron en las calles de Mendoza como parte de la huelga feminista que se realizó por tercera vez en todo el mundo con postulados de derechos básicos como la paridad de género laboral, salarial, el acceso a la educación sexual integral en las escuelas, la adhesión al protocolo del aborto no punible y un clamor en el que se insiste: aborto legal, seguro y gratuito en hospitales.
El paro internacional comenzó en reclamo por los femicidios, pero en cada territorio las proclamas se definen según las peleas políticas y los avances y retrocesos de los derechos del colectivo feminista. En Mendoza la multitud avanzó desde Vicente Zapata y San Martín y avanzó por calle San Martín en la previa del festejo clásico de cada inicio de marzo: la Vía Blanca vendimial.
Banderas partidarias, gremiales, carteles pintados a mano, cartones con nombres de víctimas de la violencia machista, consignas simples como "Vivas nos queremos" a otras que se han sumado en los últimos tiempos, como una organización de fútbol profesional para las mujeres.
Ni una Menos Mendoza es el colectivo que aglutinó la marcha, que se organizó en asambleas durante meses para focalizar los reclamos y sumar aportes de cada compañera.
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