El sindicato de los choferes de micros de Mendoza (Sipemom) decidirá medidas de fuerza la semana que viene si no hay avances en la negociación paritraria con los dueños de los micros nuecleados en AUTAM, que está abierta pero sin rumbo porque no hay información sobre el futuro del flujo de subsidios nacionales a la actividad. La postura fue confirmada a este medio por el titular del gremio local de choferes, Rodolfo Calcagni, quien advirtió que no modificará el modo de negociación de los últimos años, esto es: con dos instancias de mejora salarial, la actual y otra en setiembre.
El gremialista consideró que la situación de los choferes mendocinos es similar a la de los representados por la Unión Tranviarios Automotor en el orden nacional. La UTA amenazó este viernes con tomar medidas de fuerza la próxima semana ante la pasividad de la negociación que se lleva adelante en el Ministerio de Trabajo, que encabeza Carlos Tomada, con participación de la cartera de Transporte e Interior, de Florencio Randazzo, y de la Jefatura de Gabinete, de Jorge Capitanich.
Sipemom y AUTAM ya iniciaron la negociación salaria, pero en las reuniones no se produjeron avances significativos porque todo está atado al flujo de subsidios. Hasta ahora, en la última década, cada aumento salarial para los choferes fue compensado por un incremento proporcional de los fondos que aporta el Estado nacional al sistema de micros de la Provincia.
"Hablar de porcentajes hoy no tiene sentido", expresó Calcagni, asumiendo que hasta no conocer cómo seguirá la política de subsidios su organización no fijaría el piso sobre el cual pretende centrar el debate.
La paritaria de los choferes es compleja porque si bien se define entre el sindicato y los empresarios del sector representados por AUTAM tiene una incidencia determinante el Estado. Por el modelo de concesión del transporte público urbano de Mendoza, los aumentos salariales de los trabajadores reunidos en Sipemom si no se compensan con mayor recaudación fruto del aumento de tarifas son absorbidos por fondos públicos en todos los casos.
En ningún escenario la suba a los trabajadores del volante afecta la renta de los empresarios. El costo laboral es una da las variables incorporadas en la ecuación que define el precio por kilómetro recorrido que paga el Gobierno de Mendoza por el servicio a los empresarios de AUTAM. De la caja provincial sale la plata que falta para cubrir el costo de la prestación luego de reunir la recaudación más los subsidios otorgados desde la Casa Rosada.
"Si viene la plata de la Nación, bien; sino tendrán que ver ellos (la patronal) cómo hacen con el Gobierno de la Provincia", advirtió Calcagni ante la posibilidad de que se concreten los peores augurios respecto a que el ajuste de las cuentas nacionales limitarían la remesa de fondos en carácter de subsidio a sectores como el del transporte, aunque hasta ahora el dirigente es optimista respecto a la solución del tema con recursos nacionales.
Amenaza de la UTA
Este viernes, mediante un comunicado, la UTA aseguró que de no resolver sus requerimientos salariales antes del próximo martes, comenzará "un plan de lucha" y que dicha medida "es comprensible a todas las modalidades de transporte de personas por ómnibus y en todas las jurisdicciones del país (larga, media y corta distancia)", informó el portal de La Nación.
El Consejo Directivo de la UTA explicó que desde marzo se encuentran "en un proceso de negociación tendiente a determinar la pauta salarial del presente año", pero que hasta la fecha no hubo respuesta. "El proceso se encuentra en esta instancia en el ámbito de los Ministerios de Trabajo, Interior y Transporte y de la Jefatura de Gabinete de Ministros", indicó el comunicado.
En Mendoza, la UTA tiene la representación gremial de los choferes de larga distancia, servicio que es afectado por las medidas declaradas por esa entidad. Mientras, todos los conductores de micros de servicios urbanos y de media distancia son representados por el Sipemom.
