
La Marcha Federal Universitaria que recorrió las calles de la Capital tuvo momentos de tensión cuando la columna que encabezaba la rectora Esther Sánchez y la agrupación radical Franja Morada recibió el repudio a su paso junto a gremios estatales y de trabajadores perjudicados por el plan de ajuste de Javier Milei al que Alfredo Cornejo adhiere con fervor.
Sánchez marchaba en la cabecera, separada físicamente por varios metros de otras columnas. Cerca de ella, militantes de Franja Morada —la histórica agrupación universitaria del radicalismo— avanzaban con banderas y cánticos propios. Pero su paso no fue tranquilo.
Alta tensión en la marcha por la universidad pública en Mendoza. Militantes de ATE recriminaron a los manifestantes de la agrupación radical Franja Morada su alineamiento con Milei. pic.twitter.com/yFRsqTBqr9
— Periodismo Explícito (@SinMaripositas) September 17, 2025
Cuando la marcha pasaba por Juan B. Justo y Belgrano, militantes de ATE y otros sindicatos como el Satsaid (Televisión) los enfrentaron al grito de “¡Traidores!” y “¡Vendepatria!”, en rechazo al alineamiento de Cornejo con Milei. Para muchos, esa alianza representa una contradicción con los reclamos de la marcha, que exigía mayor presupuesto, defensa de la autonomía universitaria y rechazo al ajuste.
Tras el repudio, que no pasó de unos cánticos contra Milei y Cornejo y algunos escarceos entre los militantes de la juventud radical universitaria y los gremialistas, la columna de la Franja abandonó la columna central de la marcha. Dobló por 25 de mayo y cortó camino hacia la plaza Independencia.

Pero allí, en el epicentro de la movilización, tampoco se salvaron del escarnio. Cuando los altoparlantes mencionaron a Franja Morada entre los adherentes, estallaron los abucheos.
La jornada dejó en evidencia que la defensa de la universidad pública no solo enfrenta desafíos externos, sino también disputas internas sobre quiénes representan verdaderamente ese reclamo.

