Artesanos, vendedores ambulantes y feriantes protestaron en la plaza Independencia por el recrudecimiento de la violencia policial hacia estos trabajadores de la economía informal. Aseguran que la persecución es contra quienes no pueden pagar para estar en los puestos "oficiales" de venta y por eso simplemente ofrecen sus productos sobre alguna manta en el suelo. Para este sábado está prevista una nueva protesta en la misma plaza desde las 17.
Este jueves uno de ellos fue abordado con prepotencia y detenido por uniformados que le quitaron las pulseras que estaba ofreciendo a la venta. Se lo llevaron detenido a la comisaría Tercera y lo soltaron en la madrugada.
"Se vivió una jornada de extrema violencia donde persiguieron a dos compañerxs que se retiraban a sus hogares y en la parada del colectivo los redujeron golpearon y quitaron sus pertenencias sin ningún tipo de explicación. Un compañero artesano resultó detenido e imputado sin motivo con una controversial de "agresión verbal al personal policial", señalaron los feriantes en un comunicado.
Por esa razón, en la tarde de este viernes varios de ellos protestaron con sus paños vacíos en el suelo de la plaza, con leyendas como "¿Donde está la libertad?"
"Ante la grave situación económica trabajamos en lo que sabemos hacer -señalaron-. Nos ganamos el pan dignamente. Somos un sector de trabajadores que la mayoría de las veces nos vemos forzados a correr con nuestra mercadería de un lugar a otro".
"Es bien conocido el tema de la persecución que durante décadas somos sometidos por quienes argumentan sobre el ordenamiento del espacio público, pero que nosotros bien sabemos que ese argumento es parte de entender que el espacio público también se privatiza cuando hay quienes pueden pagar y quienes no", remarcaron.
Señalaron que hace algunas semanas en la provincia de Mendoza se ha profundizado la persecución "de quienes intentamos obtener dinero para sustentados. Hace semanas los inspectores y la policía vienen persiguiéndonos y quitando nuestras cosas; y a esta lamentable situación económica y de persecución se suma la represión y el maltrato, humillación y robo de nuestra mercadería".
Pablo, uno de los vendedores de artesanías en la plaza, señaló que "últimamente no nos están dejando laburar. Nosotros tenemos nuestras necesidades, pagar alquileres, familias. Hace unas tres semanas que no nos dejan laburar. Ayer violentaron a un compañero que ya se volvía a su casa, ni siquiera estaba vendiendo".
Karina, otra de las artesanas de la plaza, ofrece sus trabajos en macramé, y contó que "es difícil que te dejen trabajar en la plaza. Siempre ha sido así, salvo cuando han protestado los artesanos con protestas y cortes en la calle. Necesitamos trabajar para subsistir y tener la dignidad de cumplir con las necesidades básicas de cada uno y poder comer, no pedimos más".
La joven contó que se manifestaron con los paños vacíos "para poder protestar y que no te quiten tu trabajo, como han hecho".
