Tres hijos de Gregorio Pérez Companc les compraron a sus tres hermanos las acciones que tenían en las tres principales empresas del poderoso emporio familiar. Es una de las cinco familias más acaudaladas de la Argentina.
Luis, Rosario y Pilar Pérez Companc les compraron a sus hermanos Cecilia, Catalina y Jorge las acciones que tenían en Molinos Río de la Plata, Molinos Agro y Pecom, tres de las principales empresas del grupo que lideró Goyo Pérez Companc, apartado de las decisiones desde hace un tiempo.
Molinos Río de la Plata y Molinos Agro cotizan en Bolsa. La transacción entre los hermanos Pérez Companc se hizo por 450 millones de dólares. Pecom es una de las principales empresas de servicios petroleros. Los compradores pagaron en torno a los 100 millones de dólares.
Luis Pérez Companc está al frente de los negocios del grupo. Con la reconfiguración ganó poder. Se sacó de encima a los hermanos que en algún momento lo enfrentaron. Goyo Pérez Companc tuvo ocho hijos, Margarita, quien murió cuando tenía 19 años, y Pablo, el menor, quien denunció que su hermano mayor, el patriarca heredero, lo abusó cuando era más chico. Pablo vendió sus acciones a sus hermanos en pleno conflicto con Luis.
“Con mis hermanas Rosario y Pilar nos redefinimos y construimos una nueva unidad sobre la base de los valores que nos guían desde siempre. Porque compartimos la pasión y vocación de seguir invirtiendo en la Argentina, para potenciar el crecimiento de nuestras empresas con el valor y el coraje de todos los que las integramos”, dijo en una carta a los empleados Luis, quien está a cargo de la dirección del grupo y salió fortalecido con la operación.
En las dos Molinos, la familia tiene un 75% de las acciones, Anses otro 20% y el restante 5% flota en la bolsa.
Molinos Agro es la operación más grande del grupo, con una facturación que ronda los 2000 millones de dólares y 600 empleados.
Molinos y Pecom facturan unos 800 millones de dólares cada una por año; la primera tiene 2500 empleados y la segunda 8500 empleados.
