"Vamos a ser muy rigurosos desde el punto de vista de la fiscalización y control de precios de bienes y servicios. Hay que generar una reducción de expectativas", advirtió.
El jefe de Gabinete Jorge Capitanich, anunció el lunes un acuerdo de precios para 187 productos de consumo masivo, además de la canasta navideña a 39 pesos que se había acordado el viernes, y aseguró que el gobierno, a través de la AFIP, garantizará que se respeten los precios establecidos.
En conferencia de prensa desde Casa de Gobierno, Capitanich precisó que el acuerdo será no sólo con los supermercadistas sino también con los proveedores, y que abarcará alimentos como fideos, arroz, carne, yerba, azúcar, aceite, harina y pan, entre otros.
"Vamos a bregar para que se respete, por eso la AFIP ha establecido un mecanismo de modernización tecnológica de los controladores fiscales para controlar en tiempo real", afirmó el funcionario, y agregó: "Vamos a ser muy rigurosos desde el punto de vista de la fiscalización y control de precios de bienes y servicios. Hay que generar una reducción de expectativas".
También subrayó que "hay muchas diferencias cualitativas en el sistema de distribución de bienes" ya que "hay supermercados que tienen entre 6 y 7 mil productos en una superficie de 1000 m2 y otros que tienen 60 mil prodcutos en la misma superficie". "Hay una gran dispersión: la Asociación de Supermercados nuclea el 40% de los productos, el 60% restante se distribuye entre supermercados chinos, comercios más pequeños y despensas", explicó.
Según Capitanich, el objetivo del gobierno es "proteger el boslillo de los consumidores y que el productor tenga un precio compensatorio", por eso se impulsarán estos acuerdos "de caracter voluntario", del que formará parte "toda a la cadena: proveedores y supermercados" ya que "muchas veces los supermercados se quejan porque los proveedores aumentan los precios".
"El tipo de cambio no puede ser una herramienta única y esencial de la competitividad"
El jefe de Gabinete se tomó un momento para cuestionar a los analistas que, según indicó, hablan de "ajuste" o "fin de la fiesta" y los calificó de "agoreros" que "con nostalgias del pasado, pretenden enarbolar las banderas de una estrategia que es repudiada por la mayoría de los argentinos", en referencia a las políticas económicas neoliberales de la década del noventa.
Capitanich argumentó contra quienes afirman que la emisión monetaria genera inflación, al asegurar que "la expansión de la base monetaria de este año era la mitad que el ejercicio fiscal 2012". También sostuvo que "el tipo de cambio no puede ser una herramienta única y esencial de la competitividad" y que lo que sí puede hacer es "corregir el spread de productividad, pero en el largo plazo se corrige con inversión".
Desde el punto de vista fiscal, aseguró que Argentina "tiene un déficit muy bajo que es financiado con recursos desde el punto de vista cuasifiscal" y, en ese sentido, destacó el crecimiento del Fondo de Garantía de Sustentabilidad, que se cuadruplicó "después de que el Estado tomó los recursos previsionales, por genuinas y rentables inversiones". "El resultado fiscal no es causa inflacionaria", aseguró.
El funcionario llamó al sector privado a "invertir su rentabilidad" para "aumentar la oferta de bienes y servicios" y, de esa manera, "generar equilibrio económico". "Vamos a estimular la inclusión, el empleo, la productividad y la inversión", afirmó, y concluyó: "El desendeudamiento fue el más importante de la historia argentina y eso muchas veces no lo dicen. El Congreso será una gran oportunidad para debatir profundamente. Parece que algunos, con nostalgias del pasado, pretenden enarbolar las banderas de una estrategia que es repudiada por la mayoría de los argentinos".
Fuente: Infonews
