Celadores nucleados en el SUCEND marcharon este miércoles por las veredas del microcentro de Mendoza y luego hacia Casa de Gobierno en reclamo de un salario por encima de la línea de pobreza.
Los celadores que recién se inician, sin zona y sin cargas familiares cobran $35.000 en Mendoza, explicó Miguel Sosa, referente del gremio, que reclama una recomposición salarial de emergencia para enfrentar la crisis inflacionaria.
Es decir, que los celadores que recién se inician no sólo cobran por debajo de la línea de pobreza, sino de la indigencia, que en Mendoza quedó establecida en $38.000 para mayo. Muy lejos también está del piso de $45.540 del Salario Mínimo Vital y Móvil que rige desde junio.
Para protestar partieron desde la sede gremial en calle Catamarca y avanzaron por Espejo hacia Patricias Mendocinas, desde allí fueron hacia la sede del Ejecutivo, donde pedirían una audiencia con el ministro de gobierno, Víctor Ibáñez.
