Con la guerra por el agua del río Atuel aún no resuelta, La Pampa inició las mediciones del caudal sobre el Salado, uno de los tres ríos que esa provincia comparte con provincias aguas arriba (el tercero es el Colorado o Coli Leuvú, según el nombre original mapuche). Las mediciones permitirán una comprobación científica de la cantidad de agua que ingresa a los pampeanos y serán un virtual documento para futuras demandas por el derecho al agua, según anticiparon los funcionarios.
El sistema que se puso en funcionamiento es una telemetría y monitoreo del nivel en cuencas en el ingreso del río Salado a La Pampa desarrollado por un convenio entre la Secretaría de Recursos Hídricos de la Provincia y la Facultad de Ingeniería, con la participación de la empresa incubadora ARBIT, por un monto de 236.352 pesos, e incluye un punto de medición de nivel con visualización de acceso web y múltiples alternativas escalables, según se lee en El diario de La Pampa.
El anuncio fue realizado en una conferencia de prensa en General Pico, encabezada por el director de Políticas Hídricas, Gastón Buss, el decano de la Facultad de Ingeniería, Hernán Prieto, el secretario de Ciencia y Técnica y Extensión de la Facultad, Gustavo Peyronnet, y el director del proyecto, Fernando Stachiotti.
Buss recordó que “el río Salado ingresa por el oeste de la provincia de La Pampa y sufre un despojo similar, o incluso peor de lo que se sufre con el río Atuel, y teniendo en cuenta los antecedentes del Atuel y la necesidad de información para llevar adelante las acciones que impulsamos a través de la Suprema Corte de Justicia y con Mendoza en el Comité de Cuenca, es necesario para el Gobierno Provincial contar con la información concreta para luego apoyar las decisiones y cuestiones que llevemos adelante”.
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El río Salado es uno de los tres que deberían fluir por el terrirotio pampeano, pero sólo el Colorado ingresa con la plenitud de su caudal a esa provincia. La Fundación Chadileuvú -una de las que acompaña a La Pampa en la demanda contra Mendoza por el aprovechamiento del Atuel- señala al respecto que "los sucesivos aprovechamientos unilaterales de aguas arriba a llevado a que hoy sea un cauce seco, por donde a veces corre un caudal mínimo de agua salobre. También en este caso su desaparición ha conducido a una creciente desertización pampeana. Las provincias de agua arriba deciden y hacen diques de manera inconsulta y se niegan a establecer organismos de cuenca que permitan regular el uso equitativo".
El cauce del Salado -que es parte de lo que se llama cuenca Desaguadero, que La Pampa comparte con otras provincias ríos arriba- es hoy un cañadón salado y su aprovechamiento aún ganadero es prácticamente nulo. "El gran perjuicio para las poblaciones y su ganadería –que aún no se ha evaluado en su totalidad- son de una magnitud catastrófica", señala la fundación pampeana.
El director de Políticas Hídricas de La Pampa explicó que “el Atuel tiene hoy un Comité de Cuenca conformado en el cual, mal o bien, se está trabajando y hay mediciones, lo que sucede en el río Salado es que hoy no existe un Comité de Cuenca conformado. De hecho, y no es un detalle menor, el 16 de diciembre de 2015 desde el Gobierno de La Pampa comenzaron las acciones solicitando la conformación del Comité de Cuenca del río Salado como una necesidad manifiesta”.
También apuntó que el gobernador de La Pampa, Carlos Verna, “en el Congreso del Agua de este año, le ordenó a la Secretaría de Recursos Hídricos avanzar en la determinación del caudal ambiental que es necesario para el río Salado en la provincia de La Pampa. Este caudal ambiental se hizo para el río Atuel y fue y sigue siendo la pieza fundamental en el reclamo ante la Corte Suprema y en el Comité de Cuenca. Ahora vamos en la misma dirección con el río Salado, está próximo a iniciarse ese estudio a través de la Universidad Nacional de La Pampa, y esta estación va a ser fundamental para ese estudio y todas las actividades que desarrollemos desde la Secretaría en la defensa de los derechos de los pampeanos, en este caso por el río Salado”.
