
El gobierno de Alfredo Cornejo se hizo cargo de un área petrolera abandonada por Daniel Vila y José Luis Manzano, le puso plata para dejarla funcionando y ahora se la entregó a otra empresa, G&G Service SRL, para que la explote. La cesión de derechos es por u$S 685.000 dólares.
Se trata de Vega Grande, parte de la lengua norte de la formación Vaca Muerta, el área petrolera más alta sobre el nivel del mar de Argentina (2.800 m), está en la zona del río Atuel en San Rafael.
En 2018, tras años de explotación vía fracking, el yacimiento fue abandonado hasta que, en junio de 2021, el Gobierno de Mendoza sacó de las arcas públicas para dejarlo en condiciones.
En febrero de 1995 había comenzado la operación de Grecoil y CIA SRL, la cual continuaría hasta finales de la concesión hasta el primer trimestre de 2018.
Grecoil y CIA SRL cambió de dueños y se fusionó con otros grupos de empresas. Primero fue adquirida por Andes Energía SA, de Vila y Manzano hasta mediados de 2017, cuando Andes Energía se fusionó con la Petrolera El Trébol (PETSA), subsidiaria en Argentina de la suiza Mercuria, sumando los activos en producción y exploración de ambas. Esa sociedad luego comenzó a funcionar con una nueva marca llamada Phoenix Global Resources, donde Manzano está entre los accionistas principales.

El Gobierno promocionó la recuperación del área abandonada por Vila y Manzano "un hito para la provincia, ya que por primera vez se llevó un equipo de torre a un yacimiento de gran altura. De este modo, pasó de estar abandonada a tener picos de producción de hasta 3.600 bbl/mes, sorteando todas dificultades climáticas y operativas de un área tan aislada. Se generó un efecto derrame en las ganancias con el fisco local (regalías, cánones, ingresos brutos, etc.), empresas de servicios y personal operativo del área".