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Alfredo Cornejo recordó el motivo de la ruptura del proceso de transición en la Provincia, luego de las elecciones celebradas el 21 de junio, seis meses antes de la entrega del mandato constitucional. La última vez que el electo habló con el gobernador Francisco Pérez sobre las condiciones del traspaso fue cuando el peronista le comunicó al radical que la Casa Rosada prometió ayudarlo con la gestión, pero le negó cualquier auxilio para la herencia.
En concreto, Pérez le contó a Cornejo -según el radical- que la presidenta Cristina Fernández se había ocupado personalmente de revelarle los planes del Ejecutivo actual para Mendoza: la financiación a cuentagotas de las urgencias coyunturales y nada más. Así, Pérez ni siquiera pudo cumplir en tiempo y forma con los sueldos del Estado y a Cornejo no le interesó más la relación con el mandatario, que a esta altura apenas si puede con el aliento para llegar al traspaso.
En términos de Cornejo: "La última vez que hablé con el gobernador fue el 22 de octubre, me transmitió que Cristina le había dicho que lo iban a ayudar, como lo han hecho estos años, con financiamiento. Y, además, me dijo que Cristina le había transmitido que lo iban a ayudar a él, pero que Cornejo se arreglara con el próximo Presidente".
