"Veo muy bien al papa. Muy tranquilo y muy seguro. Cuando habla de la inseguridad lo menciona como el tema de la exclusión", expresó la mandataria al término del cónclave.
La presidenta Cristina Fernández y el papa Francisco almorzaron este lunes en la residencia Santa Marta, donde vive el pontífice argentino en El Vaticano. El cónclave entre los jefes de Estado duró alrededor de dos horas.
“Lo veo muy bien, muy tranquilo y muy seguro”, dijo la mandataria sobre el jefe de la Iglesia Católica en el aeropuerto romano de Ciampino, antes de partir hacia Francia.
"Muchos deberían leerlo y no solamente sacarse una foto con él", aseguró Cristina.
"Tuvimos una charla muy buena. El papa se mostró preocupado por la despocupacion juvenil en el mundo", destacó la Presidenta.
"Tras el encuentro, Cristina afirmó que “el Papa tiene como objetivo que la región se mantenga unida. Es su deseo. No separarse. Mantener la unión de América del sur”, continuó la mandataria.
"Veo muy bien al papa. Muy tranquilo y muy seguro. Cuando habla de la inseguridad lo menciona como el tema de la exclusión. Mencionó que la exclusión es una de los principales motivos de la inseguridad y la no estigmatización de los jóvenes frente a estos hechos. Me relató cosas sobre cómo estudiaba en un colegio industrial", insistió.
Cristina Fernández llegó a encontrarse con el papa Francisco con una bota en su pie izquierdo debido a un esguince. El Pontífice la recibió personalmente en la puerta de la residencia de Santa Marta.
Media hora antes del inicio del almuerzo con Cristina Kirchner, el papa Francisco se dejó ver en la residencia de Santa Marta. Saludó a los periodistas que cubren el encuentro y a parte de la delegación oficial que acompañó a la jefa de Estado en el Vaticano.
En una mesa del salón se pueden ver los regalos que la mandataria argentina le entregará al Pontífice. Entre ellos un termo con los colores argentinos y un libro sobre el Bicentenario de la Patria. Está previsto que a las 9 de argentina llegue Cristina Kirchner. Compartirá un almuerzo con Francisco.
El encuentro protocolar contó también con la participación del secretario de Culto, Guillermo Oliveri.
El año pasado Cristina Kirchner había visitado a Francisco durante los actos por su asunción como Papa. Luego se vieron las caras en junio, durante la Jornada de la Juventud, en Río de Janeiro.
El esguince de la mandataria
La presidenta Cristina Fernández sufrió el domigo en la noche un esguince de tobillo izquierdo al realizar un ômal movimiento" en el hotel Edén, por lo que ingresó utilizando una bota ortopédica, tras ser atendida en el hospital universitario Humberto Primo de Roma, confirmó la Unidad Médica Presidencial.
Los regalos para el papa
Un termo del Bicentenario, un libro con la imagen de Néstor Kirchner, un cuadro de Santa Rosa de Lima pintado con un vino malbec argentino y una foto, son algunos de los regalos que Cristina llevó hasta la ciudad de Roma para entregarle al papa Francisco.
Fuentes: Infobae / La Nación