Eso "sin recibir contraprestación alguna" por parte de la empresa, calculó el Gobierno. Pidió "tranquilidad a empleados y contratistas". Entre las exigencias de la compañía apareció la recuperación ancitipada del IVA y la eliminación de retenciones.
La exigencia de la minera VALE del pago con bonos de deuda externa a valor nominal, la recuperación anticipada de IVA, la eliminación de retenciones al cloruro de potasio y la reducción de los compromisos de inversión ante las diferentes jurisdicciones implica un "aporte estatal de aproximadamente 3.000 millones de dólares en el curso de dos años y sin contraprestación alguna", según calculó el Gobierno Nacional tras conocerse que la empresa pretende no reactivar la mina de Malargüe.
La situación hizo que el gobernador viajara en persona a Buenos Aires, tras lo cual desde la Rosada aseguraron que "el gobierno argentino desea llevar tranquilidad a los trabajadores y aquellas empresas contratistas de que arbitrará todos los medios conducentes a la continuidad del proyecto y a recuperar la dinámica de trabajo prevista", aunque no aclaró en qué términos lo hará o si está definitivamente cerrada la puerta con VALE o sólo se trata de un tire y afloje por exenciones impositivas.
La operadora brasilera diseñó en Potasio Río Colorado la mayor unidad de producción de cloruro de potasio del mundo, con una capacidad de 4.3 millones de toneladas por año, y ahora, según el Ejecutivo, "pretexta que estimó inicialmente el monto de inversión para desarrollar el proyecto en 5.9 mil millones de dólares, destinados a la construcción de la mina, la infraestructura de transporte asociada (400 nuevos kilómetros de ferrocarril), la construcción de una terminal portuaria propia y una generadora de electricidad y las inversiones necesarias para dar cohesión integral al proyecto. A los dos meses de su inicio VALE incrementó su estimación a 8.6 mil millones de dolares, para elevarlo más tarde a 10,9 lo que, manifiesta afecta significativamente la competitividad y el atractivo del proyecto".
Para el gobierno nacional, "lo cierto" de toda esta historia "es que la actual crisis económica internacional originada en los países desarrollados viene impactando fuertemente en los niveles de consumo de diferentes commodities mineras, lo que derivó en una menor demanda y menores precios de la principal fuente de ingresos de VALE, el mineral de hierro".
Vale anunció en febrero por primera vez en diez años pérdidas por 2.600 millones de dólares, correpondientes al último trimestre de 2012.
Ahora la minera anunció que suspendió el proyecto de potasio de 6.000 millones de dólares en Argentina, desalentada por condiciones económicas incompatibles con su política de inversiones. En un comunicado la compañía reveló que ya informó la decisión a la Casa Rosada. Y esta decisión, a la que el Gobierno de Mendoza calificó de "unilateral" se debe a que VALE decidió reducir sus inversiones sustancialmente, suspendiendo y abandonando distintos emprendimientos, y concentrándose en la producción de su producto tradicional (mineral de hierro), dejando de lado sus planes de diversificación a otros minerales.
El gobierno consideró que "aún a pesar del actual contexto de crisis internacional, mantiene su atractivo económico y financiero" y consideró "grave" el parate de VALE por su "impacto laboral social y económico para la región afectada".
Informe Explícito: La crisis de la minera Vale