La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, propuso consultar a la ciudadanía sobre la pertinencia de convocar a una asamblea constituyente con el objeto de realizar una profunda reforma política del país.
Lo hizo en la tarde de este lunes, durante una reunión -transmitida en vivo por la televisora estatal NBR- con gobernadores y alcaldes a los que citó para concertar respuestas a las protestas callejeras masivas de las últimas semanas, informó la agencia noticiosa ANSA.
"Mi gobierno escucha las voces democráticas que emergen de las calles y es necesario entender estas señales para caminar más rápido y con humildad", afirmó Rousseff en el Palacio del Planalto, en el que propuso 5 puntos para un pacto nacional luego de las manifestaciones.
La mandataria propuso un plebiscito para hacer una reforma política mediante una Asamblea Constituyente específica, convocó a la responsabilidad fiscal ante la crisis mundial y a un plan nacional de transporte público y reflotó su plan de girar a la educación el lucro del petróleo submarino y llevar médicos extranjeros a hospitales públicos en favelas y en regiones del interior del país.