Diputados convirtió en ley el canje para el 7% de los acreedores que no aún entró, incluidos los fondos buitres

Share
Tiempo estimado de lectura: 4 minutos

El proyecto fue aprobado por 192 votos a favor, del FpV y sus aliados, la UCR, el PRO, el Frente Peronista y el Frente Renovador; y 33 en contra, del FAP, la Coalición Cívica y otros bloques minoritarios.

Los jefes de bloques Ricardo Gil Lavedra UCR) y Juliana Di Tulio (FpV).
Los jefes de bloques Ricardo Gil Lavedra UCR) y Juliana Di Tulio (FpV).

La Cámara de Diputados de la Nación convirtió el proyecto de reapertura del canje de deuda, que tendrá para los acreedores los mismos beneficios que se otorgaron en las reestructuraciones realizadas en 2005 y 2010, y que fueron aceptadas por el 93 por ciento de los bonistas.

El proyecto fue aprobado por 192 votos a favor, provenientes del Frente para la Victoria, sus habituales bancadas aliadas, el radicalismo, el PRO, el Frente Peronista y el Frente Renovador; y 33 en contra, del FAP, la Coalición Cívica y otros bloques minoritarios, en tanto se registraron 4 abstenciones.

Durante la sesión, el presidente de la comisión de Finanzas de Diputados, Carlos Heller (Nuevo Encuentro), sostuvo hoy que la estrategia para cerrar un acuerdo con el 7 por ciento de acreedores que no ingresaron a los dos canjes anteriores de títulos de la deuda "es una causa nacional que nos tiene que encontrar unidos más allá de las diferencias partidarias".

Como miembro informante del dictamen de mayoría a favor del proyecto para reabrir la llamada Ley Cerrojo, Heller sostuvo que "nuestro país está siendo objeto de despiadados ataques judiciales de los llamados fondos buitres" y aseguró que el fallo del juez neoyorkino Thomas Griesa desconoce principios de soberanía nacional y de "trato justo y equitativo" hacia los acreedores.

Además el diputado, cuyo bloque es aliado tradicional del oficialismo, resaltó que el proyecto del Poder Ejecutivo expresa "una vez más" la "voluntad de pagar" de la Argentina su deuda, pero en condiciones que le permitan continuar su crecimiento porque, como recordó que dijo el ex presidente Néstor Kirchner, "los muertos no pagan".

Las comisiones de Finanzas y Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados dieron ayer dictamen favorable al proyecto. En el encuentro, que se desarrolló en el Anexo C del edificio de la Cámara Baja, Lorenzino sostuvo que "no aceptamos las presiones internas y externas sobre el anuncio del pago de la deuda", y reiteró la voluntad de de arreglar con los holdouts.

Recalcó que el país lleva pagados "más de 2.000 millones de dólares por el corralito y el corralón; casi 20.000 millones de dólares por el Boden 2012, y hemos pagado, por los canjes de 2005 y 2010, casi 21.000 millones de dólares", sostuvo que con los pagos realizados el peso de la deuda con privados y en moneda extranjera de la Argentina es de "menos del 10 por ciento del PBI" y que "después del pago del Bonar (este jueves) será debajo del 9 por ciento del PBI".

"Que quede claro el compromiso de la Argentina de arreglar con el 7 por ciento de los bonistas restantes. Esta es la misma oferta que se les hizo en las anteriores oportunidades y con esta oferta la Argentina ratifica y afirma su posición", añadió.

El funcionario defendió la política de reestructuración de deuda llevada adelante por el kirchnerismo e hizo hincapié en que "el 93 por ciento de los acreedores aceptó las propuestas de la Argentina" y, en cambio, los llamados Fondos Buitre representan "solo el 7 por ciento" de los bonistas.

En ese sentido, Lorenzino -quien estuvo acompañado por el viceministro del área, Axel Kicillof, y el secretario de Finanzas, Adrián Cosentino- argumentó que, en cualquier renegociación, "cuando ingresa más del 65 por ciento" de los actores "claramente habilita la resolución de fondo del problema" e insistió en que "la Argentina busca la solución definitiva" del tema.

En el plenario -donde hubo además dictámenes en minoría de parte de la UCR, el diputado de la Coalición Cívica Alfonso Prat Gay, de su colega del GEN Gerardo Milman y del de Unidad Popular Claudio Lozano- se escucharon preguntas y críticas de parte de los opositores.

El radical Ricardo Gil Lavedra criticó la demora de la reapertura y que se hiciera luego de que se conociera el fallo adverso de la justicia de Estados Unidos; Prat Gay advirtió sobre lo que consideró "regalo obsceno" al referirse al cupón PBI.

Lozano alertó sobre lo "preocupante" de la situación dado que los mismos funcionarios habían indicado que de si se confirma el fallo de los Estados Unidos se caería en una situación similar al 2001 y consideró que ello reclama al menos una "revisión de la estrategia adoptada" hasta ahora.

Asimismo, intentó incomodar a Lorenzino cuando le preguntó "si es cierto que usted estuvo el 2 y el 3 de octubre de 2008 en la oficinas de la consultora Arcadia discutiendo sobre el alcance del canje que se realizó en 2010", pero el presidente de la comisión de Finanzas, Carlos Heller, cabecera del debate, excusó al ministro de contestar esa pregunta "por improcedente".

La iniciativa, aprobada sin modificaciones la semana pasada en el Senado, autoriza al Poder Ejecutivo a "llevar adelante todas las acciones necesarias para la conclusión del proceso de reestructuración de los títulos públicos en estado de diferimiento de pago", que en la práctica significaría la tercera reapertura en ocho años del canje de deuda.

El proyecto busca suspender la denominada "Ley Cerrojo" y habilitar de nuevo, en las condiciones de 2005 y 2010, el canje de bonos anteriores al 2001 y sumar así al 7 por ciento de los tenedores de títulos que rechazaron las referidas reestructuraciones.

 

Fuente: Infonews

 

 

Share