"Creo que el principal problema de este país es ser políticamente correcto. Si no te gusta lo que digo, lo siento". El multimillonario Donald Trump dominó anoche el primer debate televisivo de los precandidatos republicanos en Estados Unidos : se mostró seguro y firme en sus argumentos, sorteó preguntas espinosas y logró que otros candidatos respaldaran sus opiniones. Además, dejó en claro que mantendrá su postura de una eventual postulación por fuera del partido.
"¿Hay alguien que no esté dispuesto a comprometer su apoyo al candidato que resulte nominado por el Partido Republicano y que tampoco esté dispuesto a prometer que no intentará una candidatura independiente?", preguntaron a todos los candidatos. Sólo Trump levantó la mano.
El empresario, una celebridad en Estados Unidos, dejó así la puerta abierta a una candidatura independiente, uno de los grandes temores del Partido Republicano.
Con la presión de la emisión en directo en televisión y del escaso tiempo para contestar preguntas, el primer debate de los aspirantes republicanos a la Casa Blanca en 2016 afianzó a los candidatos mejor posicionados.
A 15 meses de los comicios presidenciales, todas las miradas estaban puestas en Trump, quien encabeza los sondeos y quien nunca había participado en un debate frente a experimentados políticos con años de carrera a sus espaldas. El magnate no defraudó. Mantuvo su retórica provocadora, incluso contra una de las moderadoras del debate, y dejó claro que su campaña presidencial será atípica.
"Creo que el gran problema de este país es ser políticamente correcto. No tengo tiempo para lo políticamente correcto y, seamos honestos, este país tampoco lo tiene", lanzó Trump, y advirtió que Estados Unidos se está "quedando por detrás" de países como China.
Ante el elevado número de precandidatos republicanos, 17 en total, y la imposibilidad de hacer un debate que incluyera a todos los postulantes, la cadena de televisión Fox News decidió invitar sólo a diez de ellos al debate de máxima audiencia.
Además de Trump, participaron el ex gobernador de Florida Jeb Bush, el gobernador de WisconsinScott Walker, el senador Ted Cruz, el ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee, el neurocirujano Ben Carson, el senador Marco Rubio, el senador Rand Paul, el gobernador de Ohio John Kasich y el gobernador de Nueva Jersey Chris Christie.
Los siete candidatos restantes tuvieron que conformarse con un predebate, que quedó deslucido por la falta de los favoritos y en el que destacó Carly Fiorina, ex consejera delegada de Hewlett-Packard.
"Sí, es el show de Trump", concluyó Político tras el debate. "Dos asuntos dominaron el debate: Estados Unidos y Trump", tituló The Washington Post. "Trump domina un debate ruidoso", resumió el diario político The Hill.
Fuente: diario La Nación (con información de AP, DPA y EFE)