El asesinato del médico Sebastián Prado en la puerta de su casa de la Sexta Sección fue el provocador de la decisión sin más dilaciones. Los efectivos traspasados seguirán siendo policías.
El gobernador Francisco Pérez firmó el traspaso de la división Criminalística de la Policía a la órbita de la Suprema Corte de Justicia dando nacimiento a la meneada Policía Judicial. "Es un hecho histórico", calificó el mandatario al acto desde su cuenta de Twitter mientras se producía la firma.
El acto formal de firmas se desarrolló este viernes en la mañana en dependencias de Poder Judicial, adonde fue Francisco Pérez a anunciar que Mendoza tendría finalmente un cuerpo de detectives despegado de la conducción de las fuerzas represivas provinciales.
En concreto, desde ahora los 170 integrantes del cuerpo de policías con tareas científicas dependerán de la Procuración General de la Suprema Corte, encabezada por Rodolfo González, el jefe de los fiscales, quienes a su vez son los responsables principales de las investigaciones de los delitos.
El traspaso se hizo mediante un convenio entre los Poderes Ejecutivo y Judicial a la espera de que la Legislatura debata con tiempo un proyecto de ley sobre Policía Judicial. En este escenario, en la práctica se irán puliendo los artículos de una norma que será instrumento de una herramienta ya creada y en funcionamiento, según un convenio.
La Policía Judicial se prometía como la solución a todos los problemas de las investigaciones delictivas después de cada crimen resonante, entonces no podía su nacimiento efectivo estar desvinculado de una experiencia colectiva dolorosa. El asesinato del médico Sebastián Prado en la puerta de su casa de la Sexta Sección fue el provocador de la decisión sin más dilaciones. La iniciativa la tomó Pérez, quien fue a ver al Procurados tres días después de este crimen para comunicarle que esta vez el trasvase de la conducción de Criminalística a sus dominios era impostergable.
Todavía no está claro cómo será el funcionamiento de la división policial en la órbita judicial. Lo primero que salieron a garantizar los responsables del traspaso es que los efectivos de Criminalística seguirán siendo policías frente a los efectos de las leyes laborales, porque, según consideraron los funcionarios, tienen ventajas sobre los trabajadores judiciales. Es decir, los efectivos traspasados seguirán cobrando los mismos ingresos por condiciones iguales de trabajo, advirtieron.