Según publica el diario El País, de Uruguay, el bodeguero alquilaba una casa en la zona residencial de playa Montoya de La Barra. La semana pasada le robaron dinero en efectivo y en las últimas horas los ladrones se metieron en la casa y se llevaron artículos electrónicos.
El empresario mendocino Carlos Pulenta alquiló una casa en la zona residencial de playa Montoya de La Barra en Punta del Este, Uruguay, pero, según informó El País de ese país, decidió abandonar la ciudad costera luego de los robos que sufrió en su residencia.
Pulenta sufrió un robo a principios de la pasada semana cometido por delincuentes que ingresaron a la casa y sustrajeron dinero en efectivo. La presencia de los ladrones no fue detectada por los familiares de Pulenta que se encontraban en ese momento en la casa.
Este último fin de semana, el bodeguero sufrió nuevamente la visita de los ladrones. Esta vez ingresaron por una ventana y se llevaron computadores, Ipad y celulares del empresario y su familia. A nivel policial la información fue restringida. No obstante, los medios uruguayos informaron que la denuncia del segundo robo fue presentada por la esposa del millonario el último domingo 13 pasadas las 23 horas.
Los investigadores intentan determinar ahora si ambos hechos están relacionados o si fueron perpetrados por los mismos ladrones.
Según fuentes policiales, el robo determinó que Pulenta resolviera regresar a Mendoza. El millonario es un poderoso bodeguero cuyos vinos se exportan a todo el mundo. Además, es el representante en el país de automóviles Porsche.
Pulenta se instaló en diciembre pasado en una casa alquilada en la zona de la costa de La Barra a pocos metros de otra finca ocupada por el otro comprovinciano, el reconocido oftalmólogo Robert Zaldívar, un experto reconocido a nivel mundial.
Pulenta, junto con el petrolero Alejandro Bulgheroni, aportaron siete millones de dólares para comprar una enorme bodega en Luján de Cuyo. Justamente Bulgheroni también fue víctima de un robo durante la temporada en Punta del Este. Estos casos se suman al del heredero de FIAT y a otros de menor relevancia.
