El Fondo Monetario Internacional acaba de ampliar un crédito a Argentina hasta 57 mil millones de dólares, a pesar de la advertencia del denominado staff del organismo que consideró altamente probable que el país vuelva a caer en cesación de pagos.
"Es una preocupación que tenemos y no solo sobre diciembre", advirtieron los encargados de estudiar la situación argentina en el FMI sobre la posibilidad de un estallido social en el país.
"Finalmente, los mercados han dudado del compromiso de las autoridades con el programa", advirtió el staff en su informe.
"Esto refleja en parte una estrategia de comunicación inicialmente tímida en torno al plan de estabilización, así como una estrategia de intervención de divisas poco clara y, a veces, inconsistente del Banco Central", agregó.
El equipo de Alejandro Cardarelli, jefe del staff, reportó a Christine Lagarde que la situación financiera del país es delicada debido al crecimiento del stock de deuda tomada en moneda extranjera en los últimos meses, en un contexto desfavorable para los mercado emergentes y frente a una economía local que tendrá un ajuste fiscal y monetario exigente que hará caer a la actividad.
Una nueva corrida, por los motivos que sea, pondría al país nuevamente en picada hacia el abismo, como a finales de 2001, según las previsiones del staff del FMI que evaluó la situación argentina.