El Madrid empató en tiempo de descuento y ganó por goleada (4 a 1) en el tiempo suplementario la final de la Champions League contra el Atlético. Es la décima vez que el conjunto merengue gana la el torneo de clubes más importante del mundo.
Los colchoneros ganaban el juego con gol del uruguayo Diego Godín, pero Sergio Ramos cuando habían pasado dos minutos y medio de los 90 regulares, y Gareth Bale, a los nueve minutos del segundo tiempo del suplementario, marcaron la diferencia para los merengues.
En la conquista de Bale fue determinante la maniobra previa ejecutada por el argentino Ángel Di María, quien entró al área rival en diagonal desde la izquierda para meter un remate que rebotó en el arquero y le quedó a Bale para marcar el tanto de la Champions. Lo que siguió después fue consecuencia del abatimiento físico del conjunto de Diego Simeone.
A seis minutos del final y en desventaja, el Atlético tiró la toalla. En ese contexto marcó Marcelo el tercero para el Madrid. Y Cristiano Ronaldo hizo el cuarto de penal. Fue expulsado en esa instancia el Cholo Simeone.
El gol colchonero llegó de una pelota parada a través de la cabeza del uruguayo Diego Godín. En el primer tiempo los equipos madrileños se repartieron el manejo de la pelota sin lastimar al adversario. La única posibilidad anterior al gol la tuvo el Real Madrid luego de que Thiago perdiera una pelota en su campo y le permitiera al equipo blanco atacar por primera vez en el partido contra una defensa desarmada. Bale pateó sin mirar el arco y la pelota salió apenas desviada. A los 8 minutos del partido, Diego Costa quien llegó entre algodones, fue reemplazado por Adrián.
En el segundo tiempo el Real Madrid consiguió meter al equipo de Simeone muy cerca de su arquero Courtois, quien respondió siempre con seguridad. Los colcheneros lo aguantaban, con pasajes en los que era abrumado por el ataque del rival, que en el tercer minuto de descuento, encontró el empate desde la cabeza de Sergio Ramos.
Físicamente, el Madrid encaró el suplementario en mejor condición que su rival. Pero recién a los nueve minutos del segundo tiempo pudo sentenciar el pleito. El gran responsable fue Di María con una diagonal de la muerte al área logró hacerse espacio para rematar y tras el rebote en el arquero la pelota le quedó Bale, que sólo debió direccionarla con destino a la red.
El Atlético en ese momento no tenía resto para más. Entonces, Marcelo encontró espacio para su gol y Cristiano Ronaldo dispuso de un penal para anotarse como goleador en la final.