El acto fue este sábado en el hotel Arena de Maipú. Vinieron dos operadores estrellas del macrismo: Emilio Monzó, Ministro de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, y Humberto Schiavone, presidente del Pro.
Richard Battagión asumió la presidencia del Partido Demócrata en el hotel Arena Maipú con una melodía para los oídos de los enviados especiales de Mauricio Macri: aseguró que el jefe de gobierno porteño "es el mejor candidato para derrotar al kirchnerismo".
El flamante jefe del PD responde al diputado nacional Omar De Marchi, quien tiene aceitados vínculos en el corazón del partido de Macri, el Pro. Los alineamientos nacionales son un motivo de debate en la interna del PD y aunque muchos en la actualidad sostienen que lo mejor es situarse bajo el ala del macrismo, otros se mantienen expectantes de los movimientos de los puntanos Rodríguez Saá, con quienes compartieron las presidenciales del 2011, en las que fue candidato el ex gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá.
En el orden local, Battagión prometió “encarar un profundo proceso de reformas hacia dentro del partido a fin de modernizarlo, renovarlo y transformarlo” y aseguró que “la apuesta interna será por el protagonismo de los jóvenes y mujeres priorizando la capacitación de los dirigentes”.
Luego expresó el deseo de buscar “que el PD deje de ser un partido de oposición y pase a ser un partido de gobierno”. A renglón seguido ratificó la postura del partido de “no apoyar de ninguna forma la reforma de la Constitución nacional y provincial”.
De Marchi, el verdadero dueño del poder del aparato demócrata con la asunción de Battagión, fortaleció la intención de la nueva conducción de ser parte del esquema nacional del macrismo con un armado provincial acorde a ese fin. "Debemos lograr la conformación de un frente amplio que incluya al PRO, a sectores del peronismo disidente e independientes", pregonó el diputado que termina en diciembre su segundo periodo consecutivo en el Congreso.
El acto de asunción de Battagión contó con la participación de unos 500 dirigentes provinciales y de los enviados porteños Emilio Monzó, Ministro de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, y Humberto Schiavone, Presidente del PRO a nivel nacional.