La población de Gaza bajó un 6% desde que empezó la ofensiva israelí en 2023, según datos oficiales de la Oficina Palestina de Estadísticas.
Alrededor de 45.500 palestinos, más de la mitad de ellos mujeres y niños, han muerto desde que comenzó la guerra y otros 11.000 están desaparecidos, dijo la oficina, citando cifras del Ministerio de Salud de Gaza dirigido por Hamás.
Los números de las autoridades palestinas indican que cerca de 100.000 abandonaron el territorio, mientras que se estima que otras 55.000 perdieron la vida. Hoy el número total de personas asciende a 2,1 millones, de los cuales casi la mitad tiene menos de 18 años.
Según el informe, "en octubre de 2023, la ocupación israelí desató una brutal agresión contra la Franja de Gaza, dirigida contra todo tipo de vida allí: seres humanos, edificios e infraestructuras vitales. Las ciudades se convirtieron en escombros y las bombas marcaron con su destrucción las casas, los muros, la memoria y las páginas de la historia, mientras barrios enteros se convertían en historia y familias enteras eran borradas del registro civil. Hay pérdidas humanas y materiales catastróficas, pero esta agresión israelí agresiva y brutal contra toda la Franja de Gaza continúa. Cisjordania no se libró de esta brutal agresión israelí, donde sufrió las continuas detenciones, redadas, cierres y restricciones de movimiento israelíes".
El ministro de Relaciones Exteriores israelí, Gideon Sa’ar, desacreditó estos números y dijo que están “fabricados para demonizar a Israel”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel afirmó que los datos de la PCBS fueron “fabricados, inflados y manipulados para vilipendiar a Israel”.
Israel ha rechazado repetidamente las acusaciones de atacar a civiles, afirmando que respeta el derecho internacional y tiene derecho a defenderse después del ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023, que mató a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomó 251 rehenes.
Israel ha dicho que busca minimizar las muertes de civiles y subraya que Hamás utiliza a los civiles de Gaza como escudos humanos, combatiendo desde zonas civiles, incluidas viviendas, hospitales, escuelas y mezquitas.
