Osama Abdul Mohsen estaba con Zaid, su hijo de siete años, en brazos escapando de la policía húngara con la esperanza de llegar a Alemania para reunirse con su otro hijo, después de tener que escapar de su Siria natal primero y de Turquía, después. Allí estaba, corriendo para salir de Hungría cuando un insólito e inesperado obstáculo lo hizo caer junto a su hijo: una zancadilla de parte de de la periodista húngara Petra László, que estaba con su cámara cubriendo el evento, y se terminó convirtiendo en la protagonista de una infame noticia.
"La patada de la periodista fue inquietante y dura... Mi sensación fue de sorpresa. Y después dolor cuando vi el miedo y el pánico en la cara de mi hijo", dijo Mohsen al diario español El Mundo desde Munich, donde se reunió con su hijo de 18 años, Mohammad Al Ghadabe, quien llegó a Alemania hace ocho meses por vía marítima.
"Mi hijo [Zaid] lloró durante dos horas. Estaba aterrado", contó, sobre el momento posterior al caer al pasto por la zancadilla de la periodista, que luego fue despedida del canal donde trabajaba.
[youtube]vWVXx9aWviA[/youtube]"Tras ello nos tomaron las huellas digitales, nos amenazaron con la cárcel", agregó, respecto del trato que recibió en Hungría, la vía elegida para llegar a Europa Occidental.
"El viaje fue agotador y muy estresante. Muy difícil y peligroso", dijo. "Podríamos haber muerto y con mucha facilidad. Este sentimiento estuvo presente en todo momento", agregó.
Mohsen dijo que su sueño era reunir a toda su familia, que incluye a su hijo mayor, Almuhannad Abdul, de 19 años, y que su plan era "superar el dolor de todo lo que hemos pasado". "Y pedir ayuda a todo ser humano que tenga la capacidad de apoyarnos para estar de nuevo juntos", completó.
Ese sueño comenzó a concretarse. Después de esa entrevista, que daba cuenta que Mohsen era entrenador de primera división en la Premier League de Siria, el refugiado recibió una oferta laboral para ser entrenador en España, según reveló hoy el diario deportivo As.
Osama Abdul Mohsen fue durante varias temporadas el entrenador de Al-Fotuwa, el club más grande de Siria.
Ahora, el director de la Escuela Oficial de Entrenadores Futbol y Fútbol Sala (Cenafe), Miguel Angel Galán, se ofreció para llevar a toda su familia a España y darle un puesto en esa entidad para Osama Abdul Mohsen y que su hijo de siete años se pueda entrenar como futbolista, su gran sueño.
Osama Abdul Mohsen llegará en las próximas horas a Madrid desde París, donde será recibido por Galán, quien dice que ya tiene una casa para la familia en Getafe (alrededores de la capital).
"Me haré cargo de la manutención y ya tengo el apoyo del ayuntamiento para ayudarles en su nueva vida", dijo Galán a AS.
Para su primer contacto con Mohsen, Galán eligió a uno de sus alumnos, Mohamed Labrouzi, quien nació en Marruecos y habla inglés y árabe, para que viajara a Munich y conocer al refugiado sirio. Después de hablar por teléfono, Labrouzi viajó a Alemania por la tarde.
"Alabado sea Dios", fue la primera reacción del refugiado sirio, con su hijo de siete años en brazos.