Con 29 votos afirmativos el Senado aprobó la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto Cerro Amarillo que presentó hace ocho años Francisco Pérez y reflotó el año pasado Rodolfo Suarez. El yacimiento de cobre está ubicado en Malargüe y en el futuro podría extraerse de allí también oro, según ambicionan los dueños.
Además de que la DIA data de 2014, cuando por ley para la minería se exige una actualización cada dos años, hay aspectos del proyecto que fueron blanco de cuestionamientos, como la presencia de glaciares cerca del yacimiento detectados por el IANIGLA e información contradictoria respecto a la cantidad de pozos a explotar.
La explotación se realizará mediante flotación. Según uno de los documentos presentados por la empresa, se iniciará la perforación de nueve pozos de no más de 400 metros de profundidad para poder determinar la presencia de sulfuro de cobre en el yacimiento.
Muy cerca del yacimiento sureño ek IANIGLA detectó la presencia de distintos tipos de glaciares, pero los empresarios y el Gobierno aseguraron que la explotación minera no los afectará.
El senador Rolando Baldasso (PRO) señaló sobre este punto de la DIA: "Estos años ha tenido observaciones que se han ido cumplimentando, hasta llegar a dos resoluciones que son la 31/14 de la dirección de minería y 472 de la dirección de protección ambiental, luego se pudo establecer que, éstas perforaciones están alejados de donde están los glaciares o peri glaciares según un informe de Ianigla. Cada perforación solo usará 2 camiones de agua, tengamos en cuenta que cuando se riegan las calles se necesitan entre 5 a 6 camiones de agua".