La votación se produjo seis años después de la firma del convenio a instancias del Ministerio del Interior con el conflicto interprovincial está nuevamente instalado en la Corte Suprema.
El Senado de Mendoza rechazó este martes el convenio entre Mendoza y La Pampa para regular el uso del agua del Río Atuel firmado en 2008 por el entonces gobernador local, Celso Jaque, y su par Oscar Mario Jorge. El compromiso, que requería aval legislativo en las dos provincias para ser válido, fue rápidamente aprobado en La Pampa mientras en Mendoza quedó cajoneado porque los términos acordados por Jaque carecían de consenso social y político.
El acuerdo, que obligaba a Mendoza a ceder un caudal mínimo de agua a La Pampa, se suscribió a instancias del Ministerio del Interior con la finalidad de zanjar un conflicto histórico entre ambos Estados. No obstante, nació destinado al fracaso porque Jaque asumió obligaciones sin contemplar el alto nivel de rechazo que generaban entre los productores del Sur mendocino.
Inmediatamente después de difundido el acuerdo interprovincial en Mendoza se configuró un escenario político y social contrario a su validación. Ni los legisladores del oficialismo estaban dispuestos a avalar el documento firmado por el gobernador, entonces, Jaque mando el expediente a dormir el sueño de los justos en una ofician de Irrigación.
Seis años después y con el conflicto con La Pampa instalado nuevamente en la Corte Suprema de la Nación, el Senado formalizó el rechazo al acuerdo Jaque - Jorge y giró el expediente a Diputados, que completará el trámite legal de defunción del convenio necesario para defender la posición de Mendoza en el pleito judicial.
El tratamiento legislativo del acuerdo se activó 4 de diciembre del año 2012 cuando, por Resolución N° 716/2012-2013, la Cámara de Senadores constituyó una Comisión Especial de Estudio de los Recursos Hídricos del Río Atuel (CEERHRA), para estudiar la situación general del río, atento a que se detectaban en varios años sucesivos faltantes importantes de agua para la distribución de sus hectáreas irrigadas.
El despacho de la Comisión Especial notificó que “ante tamaña realidad natural (la crisis hídrica) que afecta gravemente a Mendoza y a su pueblo, resultaría imposible dar cumplimiento a cualquier compromiso de la Provincia de Mendoza tendiente a garantizar a la Provincia de La Pampa un mínimo de escorrentía permanente”.