El volante mendocino del Benfica Enzo Pérez fue confirmado en la Selección por el Tata Martino

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El mendocino Enzo Pérez, volante del Benfica de Portugal, fue ratificado por Gerardo Martino en la Selección de Argentina. El maipucino fue catapultado al representativo nacional por Alejandro Sabella, quien lo dirigió en Estudiantes de La Plata antes de asumir en la Selección.

Antes del Mundial de Brasil, Pérez era uno de los futbolistas que el periodismo consideraba que podían quedar afuera del representativo nacional en los recortes de la lista de convocados para redondear los 23 integrantes que fija el reglamento. Sabella no sólo desmintió esas consideraciones, sino que lo postuló como reemplazante natural del fantástico Ángel Di María.

La confianza de Sabella en Pérez no causaba tanta sorpresa a los analistas futbolísticos portugueses como a los especialistas argentinos. Es que el ex jugador de Godoy Cruz llegó al Mundial tras brillar en el Benfica, que se coronó campeón de liga en su país. El antecedente no le aportó demasiado para el conocimiento del gran público argentino, entre el que era muy poco conocido.

Pero la vida de Pérez en la Selección tendría un giro trascendente a los 30 minutos del partido por cuartos de final contra Bélgica, cuando Sabella lo mandó a la cancha por Di María, quien quedó fuera de combate por una lesión. La respuesta futbolística del mendocino fue óptima desde el mismo momento de su ingreso al terreno.

Al final de ese encuentro, con el pase argentino a la semifinal abrochado, el volante del Benfica había disipado todas las dudas sobre quién debía ingresar al equipo si no estaba Di María en condiciones de jugar, como finalmente sucedió en los siguientes juegos de la Selección por semifinales, con Holanda, y la final con Alemania.

Tras el Mundial, Pérez visitó a sus familiares en Maipú y fue objeto de múltiples reconocimientos en la Provincia, mientras en Europa se ventilaron varias ofertas de clubes grandes para hacerse con sus servicios, todas rechazadas por la dirigencia del Benfica, que priorizó conservar en sus filas al quien fue considerado el mejor jugador del último torneo luso.

 

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