El legislador porteño Gustavo Vera, quien hace pocos días abandonó esa fuerza, afirmó que de ser "un frente antimafia y anticorrupción", pasó a ser "un frente puramente antiperonista".
El también titular de La Alameda, quien llegó a la Legislatura tras encabezar la lista de candidatos de Unen, dijo que "inmediatamente después de terminadas las elecciones" del año pasado, en ese espacio que tiene como referentes a Elisa Carrió y a Fernando `Pino` Solanas "se empezó a reconfigurar el discurso".
"A partir del 10 de diciembre empieza a haber un corrimiento acelerado del discurso; y de un frente antimafia y anticorrupción, pasamos a un frente puramente antiperonista", graficó Vera.
En ese sentido, el legislador fustigó que "asociaban exclusivamente cuestiones de mafia y corrupción solamente al gobierno de los K (por Kirchner) y se hacían los distraídos cuando estos hechos de corrupción también salpicaban, por ejemplo en Santa Fe, al gobierno socialista con el tema del narcotráfico o en la ciudad de Buenos Aires con el tema talleres clandestinos".
"Notamos que había de parte de un sector de Unen, básicamente de los radicales y la Coalición Cívica, una tendencia a votar algunas cuestiones al Pro que estaban afuera de lo que estaba acordado", añadió Vera en declaraciones a la AM 1110, al tiempo que relató que "La Alameda, ni bien terminó la elección, fue dejado a un costado del camino" con "el argumento" de que no era un partido.
En ese marco, el ahora ex integrante de Unen agregó: "Nunca nos invitaron a la mesa política, nos consultaban casi como un hecho consumado cuando había que votar algo en la Legislatura".
Consultado sobre la polémica surgida en el seno del Frente Unen tras el desplante de Carrió a Solanas durante un acto realizado el lunes con motivo del lanzamiento del FAU porteño, Vera dijo que sus miembros "están unidos solamente para sacarse fotos en fechas históricas" e ironizó: "No se ponían de acuerdo ni siquiera en el color de los sillones que tenían que haber arriba del escenario".
