El empleo asalariado registrado privado en Mendoza se encuentra prácticamente en los niveles de 2012. Lo que sí creció, y a niveles récord, es el empleo en negro, mientras que el empleo registrado privado en Mendoza cayó 0,4% entre 2012 y 2022.
Esta es una de las conclusiones de un informe del Consejo Empresario Mendocino (CEM) publicado esta semana, y que alerta sobre el estancamiento de la economía local. El trabajo recopila las estadísticas oficiales para trazar un panorama desalentador sobre el futuro laboral en Mendoza.
Por otra parte, señala el informe, también "es palpable" el deterioro de los salarios: "el ingreso por habitante cayó 11% a nivel nacional y 9% a nivel local entre 2012 y 2021. A junio de 2022, el 36,5% de los argentinos y el 38,6% de los mendocinos era pobre".
El crecimiento del trabajo en negro fue advertido, además, por Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE), que informó que en el primer semestre de este año 147.229 trabajadores están en la informalidad, lo que equivale al 43,6% del total de asalariados. En el primer trimestre de 2020 ese número era de 121.981, lo que representaba el 38% del total de asalariados.
Cita el CEM que "el Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial (OEDE) detalla que el empleo asalariado registrado privado se recuperó el 6,3% entre el segundo trimestre de 2020 y el primer trimestre de 2022, aunque acumula un crecimiento de solo 2% desde 2012".
La misma fuente revela que Mendoza creó 21.000 puestos de trabajo privados formales entre segundo trimestre de 2020 y el primero de 2022, recuperando una parte significativa de los 28.000 empleos registrados privados perdidos cuando la cuarentena golpeó fuerte.
Sin embargo, remarca, varias ramas de actividad aún no alcanzan los niveles de 2019, como es la situación de la industria manufacturera (-1%), el agro (-2%) y el turismo, como parca el siguiente cuadro:
En este punto, datos oficiales revelan que los departamentos de Mendoza en los que los empresarios del vino y el turismo tienen más peso en la matriz del empleo privado son los que tienen a los trabajadores más pobres. Es decir, no sólo crece la informalidad sino que en dos de las industrias insignias de Mendoza se pagan los peores salarios.
Los empresarios del vino y del turismo pagan los peores salarios privados de Mendoza
Otro caso emblemático es el de la construcción que, aunque recuperó terreno, está 31% por debajo de su nivel previo al inicio de COVID-19.
Este es el informe completo del CEM:
