"En Mendoza siguen precarizando al personal de salud... Nos van a seguir viendo en las calles y no en los hospitales. No los votamos más". Así se manifestó la Asamblea de Residentes de Mendoza tras el fracaso de una nueva instancia de negociación con el gobierno en la que Rodolfo Suarez les ofreció 11% de suba en dos cuotas, no acumulativas, y la eliminación de los bonos en negro que había ofrecido antes.
La Asamblea de Residentes se formó en julio ante la indolencia del Ejecutivo con los profesionales de la salud. Están nucleados en AMPROS, un gremio dialoguista con el oficialismo. Sin embargo, el sindicato rompió lanzas después de la magra suba decretada en enero de 2021 tras un año sin recomposición salarial y con una inflación anual de más de 50%.
Entre los residentes, además, no cayó bien el fin del alerta sanitaria decretado por Suarez sin antes haber solucionado el conflicto salarial. Esto porque, como dijeron en la huelga de la semana pasada, el sector médico siente que sostuvo la política aperturista del mandatario en el 2020. Y que el Gobierno les dio la espalda cuando llegó el momento de reconoer ese esfuerzo con algo más que aplausos en los balcones.
ESENCIALES para el pueblo..
INVISIBLES para Suárez.. #saludenlucha#precarizacionlaboral pic.twitter.com/iSXuGZtnJt— Asamblea Residentes Mza (@AResidentesmza) August 11, 2021
