"En un mundo donde los valores los guardan los bancos, cualquiera que haga un poema, o un dibujo, está militando"

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gula
La Gula: "Horacio Oliveira era un lector voraz, devoraba todo lo que caía en sus manos, un libro, una revista, un prospecto, un diario (viejo o nuevo) un cartel, instrucciones para usar la licuadora o el ventilador, los mensajitos del celular, en fin, su adicción por lo escrito no tenía límites. Fruto de la misma, su cabeza creció y creció hasta que perdió el equilibrio". Siete pecados capitales. Tomado del blog de Luis Scafati.

 

Por Gabriela Valdés
@gabivaldes

Es casi imposible no cometer gula con Luis Scafati cuando todo lo que ofrece en su banquete visual, desde el más ínfimo canapé, es exquisito. Este gran bribón que se divierte con el mundo que fluye convirtiendo todo lo que mira en arte, ahora ofrece otro plato principal: ha dibujado la obra de Spinetta, todos de pie...

"Vi crecer al rock nacional desde su inicio, Luis Alberto Spinetta, Charly Garcia, León Gieco y tantos otros me acompañaron con su música a lo largo de muchos años. Sin saberlo, ellos estaban en mi taller. Seguramente, les debo algunos dibujos", ilustra este mendocino desde su atelier en Buenos Aires sobre el libro que lleva por título "Luis Alberto Spinetta, Luis Scafati". Otro artista, Diego Perrotta, ilustró las canciones de Gustavo Cerati, ambos en concepto de "objeto-libro" coleccionables que acaban de salir a la venta.

Antes de caer en la tentación de abundar sobre el currículum de Luis como ilustrador de libros -el Gregorio Samsa al que le puso rostro debe ser para miles el mismísimo Gregorio Samsa imaginado por Kafka-, mejor un convite a pasear por su propio blog.

Se presta Scafati a una charla con Explícito sobre la música, Spinetta, las musas y el arte militante, sin mayores vueltas.

spinetta

 

-¿Por dónde se empieza a dibujar a Spinetta? ¿Hubo alguna directriz de la editorial sobre qué canciones dibujar?
-Comencé a trabajar con un conjunto de canciones que seleccionamos con el editor, no quise que fuera mi única mirada, ya que el libro busca una perspectiva del mundo Spinetteano. Después mi interpretación fue totalmente libre, trabajé con total independencia. Esa es mi parte, por lo demás un libro siempre es una construcción colectiva, desde la impresión, el diseño, el papel o la tipografía hacen también a la calidad del mismo, mas allá del contenido.

-La tapa del libro sugiere una huella, y también tiene una sonrisa, que no tiene el hombre dibujado por Luis para el primer disco de Almendra. ¿Tienen significado cada una de las cosas de tu dibujo como en el disco de Almendra?
-Todo encierra un significado, mas allá de la voluntad del autor. Es un error común pensar que un autor, sea de una pintura, una partitura, un poema etcétera. tiene conciencia de lo que hizo. Seguramente hay mentes mas sagaces que encuentran en las imágenes que elaboro mejores significados que los que yo puedo explicitar con palabras. La huella digital en la cara del flaco es mi propia huella ampliada a mil, es una manera tal vez de identificarme con el poeta. Obviamente no estaba ausente la tapa del disco que dibujara Luis. Un retrato es una aproximación a esa persona, una interpretación de ese mundo.

-El libro tiene 86 páginas, supongo que más o menos la misma cantidad de dibujos acompañando poemas y canciones ¿cuál de las ilustraciones te costó más y cuál salió en cinco minutos?
-Cuando ilustro un libro es como una pequeña batalla, donde tal vez lo mas difícil es encontrar un tono general, algo que articule un dibujo con otro. Mientras estás en el fragor de ese combate, hay cosas que salen sin que te des cuenta y otras les cuesta mas ver la luz. En general, las letras del Flaco son complejas, su mundo es complejo, por momentos su búsqueda espiritual lo lleva por caminos intrincados y todo eso está en su música. Traducir una canción a una imagen es por momentos muy complicado, por ejemplo Durazno sangrando, donde habla con metáforas del tiempo que transcurre, hoy sos un joven y mañana un viejo...busqué esa síntesis en el extraño ser junto al río que fluye.

-¿Algún personaje de las canciones ya existía antes en tu cabeza? El Capitán Beto, la Muchacha ojos de papel, Fermín tal vez?
-La música es un regalo de los dioses. En mi taller, mientras trabajo, escucho música, me inspira, me ayuda, la disfruto. El rock nacional estuvo siempre presente, el Flaco, Charly, Luca...o sea, no dibujaba algo desconocido, sino que es parte de mi cotidiano. Por lo tanto imágenes previas al libro si existían, miles, yo pienso con imágenes así como un matemático piensa con números o un escritor con palabras.

-Ausentaste a Ana, la que duerme. ¿Tiene explicación?
-Es que antes que nada esa canción me sugiere una ciudad nocturna, donde el silencio es principal protagonista, Ana no duerme es un ser desvelado, como los gatos,como lo somos todos los que a veces soñamos.

-Esa tapa de Almendra fue hecha en medio de la militancia de Spinetta en JAEN (la sigla resume "Juventud Argentina para la Emancipación Nacional", un movimiento perteneciente a la juventud peronista), donde Spinetta pretendía aportar desde la cultura. ¿El arte puede no ser militante?
-El arte siempre está expresando a quien lo hace, una persona, a una época, por lo tanto siempre es militante. Hay tantas maneras de militar como seres en el planeta. En un mundo donde los valores son los que guardan los bancos, cualquier tipo que haga un poema, o un dibujo o una pintura está militando, su espíritu es un guerrero que no se rindió.

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