En una visita a Martino, el otrora crack mendocino Bocha Ponce contó que trabajó de minero en Chile cuando se retiró del fútbol

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El mendocino José Daniel Ponce, entre Martino y Pautasso, en el entrenamiento de la Selección en el predio de Everton, en Chile.
El mendocino José Daniel Ponce, entre Martino y Pautasso, en el entrenamiento de la Selección en el predio de Everton, en Chile.

El mendocino José Daniel Ponce, un eximio enganche de la década del '80, fue a visitar al cuerpo técnico de la Selección durante un entrenamiento en el predio del club Everton, de Chile, en plena Copa América. Ponce está alejado del negocio de la pelota y las camisetas, con la que mantiene una relación cada vez que lo invitan a un picado.

El Bocha jugó en Estudiantes de princios de los '80, con Carlos Bilardo de entrenador y Alejandro Sabella y Marcelo Trobbiani de compañeros en la mitad de la cancha, junto a Miguel Ángel Russo. Un cinco y tres diez. Antes, había hecho las inferiores en Godoy Cruz, club en el que debutó en primera cuando tenía 16 años. De pibe emigró al club platense.

Ponce fue a visitar a Martino porque escuchó que el Tata lo nombró en una anécdota de su época de jugador. En el predio de Everton, fue abordado por los periodistas que cubrían el entrenamiento de la Selección, entre ellos un enviado especial de Cancha Llena que volcó el suceso a las páginas del suplemento de deportes de La Nación.

"Me dijeron que el otro día Martino me mencionó, que habló de mi... Bueno, me acerqué para que podamos hablar", sostuvo el Bocha Ponce. Vestido con zapatillas, un chaleco azul y un pantalón rojo, recuerda con cariño cuando era compañero y rival del hoy entrenador de la selección argentina. "Sabés lo que jugaba Martino, nene... Mirá que nosotros teníamos grandes jugadores en Estudiantes, esos tres diez, pero le dije que su Newell's y él nos daban un dolor de cabeza terrible", recordó el ex Estudiantes campeón en el Metropolitano 1982 y el Nacional 1983.

"Trato de jugar cada vez que puedo", confesó y relató que fue de su vida luego del fútbol: "Trabajé como entrenador en un equipo de la tercera aquí, en Chile. Éramos uno de los equipos con menos presupuesto, ascienden uno o dos de cuarenta y pico. El presidente pedía cosas imposibles", dijo.

"Después del fútbol, administré un hotel y, luego, trabajé en una empresa de minería. Manejé camiones, pero la última vez fui supervisor", comenta Ponce, quien entre risas agregó: "Si me preguntan qué hago ahora, estoy de vacaciones", agregó.

Para el Boca Ponce, lo que demuestran las selecciones de Argentina y Chile en la cancha "es lo más parecido a lo que nosotros jugábamos con Estudiantes".

 

En defensa de las piernas de Messi

Ponce jugó en el fútbol argentino de principio de los '80, que haciendo memoria aparecen como más violentos en los campos de juego que los tiempos modernos. Con esa experiencia personal encima, el Bocha dice que tiene miedo por lo que pueda pasarle a Lionel Messi si siguen golpeándolo como hasta ahora en la Copa América.

“Me llama la atención cómo lo quieren cortar a Messi. Le van muy fuerte, innecesariamente. Me preocupa que lo golpeen tanto, tengo miedo de que le rompan un tobillo. El árbitro mexicano (Roberto García Orozco) no lo cuidó. No está bien esa frase de que el fútbol es para hombres. El fútbol es habilidad, pases, gol y recuperar la pelota de buena manera. ¿Qué más?”, dijo.

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