Este 1 de julio marcharán por segunda vez en Mendoza contra los travesticidios y crímenes de odio, con dos casos emblemáticos como insignia: el crimen de Melody Barrera y Josefina Cruceño.
Esta edición -que suele hacerse el 28 de junio-fue trasladada a un sábado para que pueda asistir la mayor cantidad de personas.
Se concentrarán desde las 15 en el KM0 y desde las 16 recorrerán las calles del microcentro para culminar en la plaza Independencia con la lectura de un documento y espectáculos.
"Es importante que salgamos a las calles y las tomemos porque las calles son nuestras. Para generar conciencia de que la comunidad trans está siendo violentada constantemente por el sistema de salud, de educación. La idea es generar visibilidad para que dejen de ser desplazadas, para que tengan acceso a la vivienda y el trabajo", postuló Zila Guevara Vicencio, activista por los derechos humanos y lgbt en Mendoza.