Por Cecilia Osorio
Especial para Explícito
Insisten: “Johana tiene que aparecer”. La buscan. Revitalizan el reclamo, expresión de amor y Justicia. A tres años de la desaparición de Johana Chacón, sus compañeros de la escuela hicieron un nuevo video. Tanta es la fuerza asumida frente a la pérdida del rastro que redoblaron la apuesta y reconstruyeron la infancia silenciada: en las imágenes se los puede ver asumiendo con el cuerpo y la voz los recuerdos, mostrando a través de fotografías esos momentos en que la niñez era posible. Johana en la escuela, Johana riendo, Johana presente.
Frente a cámara los adolescentes no dejan de hablarle y le piden que “aguante”. Se resisten a la injusticia por una inocencia que también a ellos les arrebataron.
[youtube]M8pLhkZ3mJg[/youtube]Este viernes, al cumplirse otro aniversario de búsqueda de la chica oriunda de Lavalle, quien tendría hoy 16 años, los estudiantes harán público el trabajo audiovisual y piden la ayuda de todos para replicar su mensaje en medios y redes sociales.
Ese mismo día, a las 18.30, se realizará un acto en calle Sarmiento, del mismo departamento, donde está el mural con el nombre Johana y varios signos de interrogación por la investigación que todavía no determina qué pasó con ella.
Construir la vida
Como señala el docente Rubén Antinori Piticchio, a cargo del taller de teatro en el que surgió el trabajo audiovisual, “los compañeros quisieron construir y hacer pública la vida de Johana”, revelando algunos trazos de esa niñez arrebatada.
Johana Chacón desapareció el 4 de setiembre de 2012, después de asistir a la primaria Virgen del Rosario, ubicada en la localidad de Tres de Mayo, del departamento de Lavalle. Fue vista por última vez bajándose del colectivo e ingresando a una finca en la que vivía su hermana Beatriz con su pareja Mariano Luque, hoy juzgado por privación ilegítima de la libertad a raíz de la desaparición de otra mujer, Soledad Olivera, cuyo caso está conectado con el de Chacón.
Hay dos investigaciones judiciales por Johana, una en la órbita provincial a cargo del fiscal especial Santiago Garay, que mantiene la carátula inicial de averiguación de paradero. La otra causa es federal y por el delito de trata de personas. Ninguna de las dos manifiesta avances certeros.
Contigua a esa escuela primaria se ubica la secundaria Elena Imazio de Cavagnola, en la que siguieron estudiando los compañeros de Johana y donde su silla permanece vacía. Desde el inicio de la búsqueda los adolescentes realizaron tres videos.
El primero se llamó Te esperamos (2013) con el que a partir de la canción Prepárame la cena de la banda Calle 13 comenzaron a verbalizar el sentimiento por la ausencia.
Después vino En tu nombre (2014): inspirados en la canción Cactus, de Gustavo Cerati, los compañeros de Johana atravesaron el círculo de silencio de su entorno para irrumpir en la Ciudad reclamando ante periodistas y políticos el derecho a la “verdad”.
Al nuevo corto decidieron titularlo Siempre presente Johana y la canción elegida fue Una palabra de Carlos Varela. Contó con la participación de 10 alumnos, con el apoyo del director de la secundaria Imazio, Pedro Ahumada, y la directora de la primaria Virgen del Rosario, Silvia Minoli, quien encabeza la búsqueda desde 2012. La red solidaria es cada vez más extensa y en esta edición sumaron el aporte de la Escuela 4-218 de Panquehua, brindando equipamiento para la realización, como también aportó su trabajo filmográfico de Camila Randis y Gustavo Pérez ayudó con la edición.
A partir de 2013, cuando los estudiantes manifestaron su necesidad de verbalizar el tema en el taller del Centro de Actividades Juveniles de los sábados, las realizaciones se convirtieron en su bandera de lucha y la escuela en una trinchera. De a poco ganaron su propio espacio. “Esta vez se armó un grupo específico para el video con todos los alumnos que quisieran participar”, contó el docente de teatro.
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