La exjueza de la Suprema Corte Aída Kemelmajer, cuestionó la embestida del Gobierno contra la Sala II, último resquicio del Poder Judicial que no domina completamente el cornejismo.
Kemelmajer señaló que el proyecto-enviado por Rodolfo Suarez esta semana a la Legislatura- ataca el recurso de Casación, "que tiene que ser resuelto por especialistas en la materia. Se supone que la Casación sirve para deliberar lo resuelto por cámaras especializadas, y tiene que ser resuelto por personas más especializadas. Este proyecto contraría la esencia propia del recurso de casación. Por eso sabiamente la Corte se dividió en salas".
Entrevistada por radio Nacional, indicó que los tribunales con prestigio en el mundo, como la Corte de Casación de Italia, la francesa y el Tribunal Supremo de España se dividen en salas. "Cuando se atiende a materias tipicas de derecho civil o penal tienen que tener jueces especializados".
"Lo peor que le puede pasar a un país es que los jueces sean calificados por lo partidario -cerró Kemelmajer-. Todos los jueces son seres humanos y tienen formación, pero a los jueces se los debiera calificar por la ideología que pueden tener, pero decir que un juez es radical o peronista, eso es muy malo para un país, quita confianza en la justicia".
Señaló que el proyecto del oficialismo, si se aprueba, "va a generar mayor demora en la resolución de los expedientes" porque los jueces no especializados en las distintas materias deberán resolver sobre las mismas en el caso de que sean sorteados, y abocarse al estudio el tiempo que esto requiera.
Puso como ejemplo a Omar Palermo, "con antecedentes en materia penal que no tiene nadie en la provincia. Si usted tiene a una persona así en materia penal tiene que aprovecharlo para que resuelva en la materia., Si no es una mala utilización de los recursos humanos".
Este es un tramo de la entrevista: