El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, envió tres helicópteros hidrantes y a su ministro de Seguridad, Sergio Berni, para ayudar a combatir los incendios en el pedemonte mendocino. El funcionario arribó a Mendoza en las primeras horas de este lunes.
Estas naves se sumaron a los dos aviones hidrantes que mandó la Nación, que pudieron trabajar pese a las fortísimas ráfagas de viento. "Esto es porque hay una pequeña ventana que permite que puedan despegar", explicaron funcionarios de la Secretaría de Ambiente.
De todas formas, el freno del Zonda y el descenso de la temperatura en la madrugada del domingo facilitaron en parte el trabajo de los bomberos de Mendoza y los que llegaron de otras provincias (entre otros, 23 del Cuartel Central y de Incendios Forestales de San Juan y 68 brigadistas de Córdoba).
Este lunes sólo quedaban dos focos de incendio activos en Luján, pero controlados, según las autoridades. No obstante, hubo que evacuar a 82 personas en un centro municipal.
“Estamos poniéndonos a disposición con todo lo que la provincia requiera. Estimamos que para el mediodía tendremos aviones hidrantes. Ahora hay viento y no han podido salir“, sostuvo el funcionario bonaerense.
“Vamos a poner todos los recursos logísticos a disposición del gobierno de Mendoza. Si no se contiene de manera rápida las consecuencias son peores. Ya hemos coordinado el trabajo que vamos a llevar a cabo”, añadió.
En Luján hubo un foco muy importante de incendio en la zona de la Colonia Suiza, donde se quemaron algunas cabañas. “Hay gente que ha perdido todo, es tristísimo. Ha sido terrible”, señalaron en la Municipalidad de Luján.
El intendente Sebastián Bragagnolo confirmó en la mañana de este lunes que los focos que quedaban activos estaban alejados de la población "y no revisten gravedad".