El precio internacional del petróleo pegó el salto más alto en una jornada desde la guerra del Golfo, en 1991. La estampida en la cotización del Brent se originó en un ataque con drones a instalaciones petrolíferas de Arabia Saudí, ejecutado el sábado, según Estados Unidos, por Irán. Como consecuencia, el mercado perdió el 5 por ciento de la oferta mundial.
Los movimientos bruscos en el mercado mundial del petróleo tienen incidencia directa en la política argentina. El presidente Mauricio Macri intervino todos los estamentos del negocio petrolero después de perder las PASO en la pelea por la reelección.
El abrupto aumento del precio del Brent mete más presión en la olla que cocina los intereses oficiales, empresarios y de la oposición favorecida en las urnas.
Para sustentar el congelamiento del precio de los combustibles, Macri estableció un precio político para el petróleo del mercado interno atrasado respecto a la cotización del Brent. Hachó la renta petrolera a la vez que abolió la liberación del mercado resuelta por el mismo Macri y ejecutada por Juan José Aranguren en su paso por el Ministerio de Energía.
La distancia entre la cotización política y la del mercado se amplió por el impacto del salto récord del precio mundial del petróleo. Los congelamientos del plan electoral de emergencia tienen fecha de vencimiento. En el caso del petróleo y los combustibles, en noviembre. Macri los estableció por tres meses. Para el día 91 no hay un plan explícito por ahora.
Recalentamiento
Los futuros del crudo Brent, referencia para el mercado argentino, subieron un 19,5 por ciento hasta alcanzar los 71,95 dólares por barril. Se trata del mayor salto intradiario desde el 14 de enero de 1991, informó la agencia Reuters. El contrato al mismo mes se ubicaba este lunes en 66,28 dólares por barril, con un alza de 6,06 dólares, equivalente a un 10,1 por ciento, con respecto a su cierre anterior.
Arabia Saudí es el mayor exportador de petróleo del mundo y el ataque a las instalaciones de crudo del productor estatal saudí Aramco en Abqaiq y Khurais ha reducido la producción en 5,7 millones de barriles por día. La empresa no ha dado un plazo para la reanudación de la producción al completo.
Una fuente cercana al asunto le dijo a Reuters que el retorno a la capacidad total de petróleo podría tomar “semanas, no días”.