La guerra entre Lobos y Abraham en Guaymallén complica la campaña de Bermejo y Palau por la Gobernación

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Diego Martínez Palau, Adolfo Bermejo y Karina Rabolini en campaña.
Diego Martínez Palau, Adolfo Bermejo y Karina Rabolini, este jueves, en campaña.

Guaymallén, adonde se gana o se pierde las elecciones de la provincia, según la máxima torcida de la política mendocina, es el escenario donde se oscurece la campaña del binomio Adolfo Bermejo y Diego Martínez Palau porque los dos principales pre candidatos peronistas en las PASO para la Intendencia, Luis Lobos y Alejandro Abraham, siguieron la guerra de la campaña durante el escrutinio, que tiene aún el final abierto.

El intendente Lobos se proclamó ganador de la interna del Frente para la Victoria el lunes, pero el ex intendente Abraham recurrió a la Junta Electoral para perdir la impugnación de mesas de modo que cambiaría el resultado que favorece a su rival. Mientras tanto, el radicalismo tiene en Marcelino Iglesias el candidato indiscutido del Frente Cambia Mendoza. En Guaymallén votó cerca del 16% del total de votantes provinciales en las PASO mendocinas, lo que le da un poder de incidencia más potente que el que ostente cualquier departamento de Mendoza.

Abraham pretende la impugnación de unas 130 mesas, en las que -denunció- se registraron maniobras fraudulentas. Con esos votos impugnados, el ex intendente dice que le gana al actual en la interna. La instancia judicial está abierta y llevará varios días para surtir efectos sobre el escrutinio, mientras en la instancia política se afila la rosca para intentar una solución al problema de Guaymallén con el menor impacto sobre la campaña provincial. El panorama general después de las PASO impone al FpV mantener sino engordar el número de votos que en las primaras sumaron todos sus candidatos, incluso los que hicieron los aportes menos generosos al 39 y pico porciento de los votos del espacio.

"Me preocupa; es un tema delicado", le dijo Bermejo al portal Mdz sobre la situación de Guaymallén durante un acto con la esposa y operadora de Daniel Scioli, Karina Rabolini, en el marco del relanzamiento de la campaña por la Gobernación de la fórmula triunfante en la interna del FpV. "Nos vamos a dar la tarea de apostar y ayudar a recomponer Guaymallén y, obviamente, a cualquier otro departamento en el que haya problemas", completó el candidato.

Con peso provincial infinitamente menor, en Malargüe también se presentó un escenario conflictivo para la definición interna del FpV. Héctor Rasso, candidato de Celso Jaque y Diego Bossio, se impuso sobre José Barro por escaso margen.

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