El diario La Nación contó que Sergio Massa tiene fe en que el establishment forzará un acuerdo del Frente Renovador con Mauricio Macri, los radicales y Elisa Carrió. El massismo busca desesperadamente un acuerdo con Macri al mismo tiempo que esa variable es considerada la más conveniente por sectores del establishment enfrentados con el kirchnerismo que buscan la promoción de un presidente afín a sus intereses.
La Nación, con la firma de Marcelo Veneranda, contó este viernes que desde Tigre admitieron que los contactos con el Pro siguen abiertos y depositaron su fe en la presión de los empresarios cercanos a Macri, que en los últimos días multiplicaron sus contactos y coincidencias en el diagnóstico político con Massa y el diputado José Ignacio de Mendiguren, ex titular de la Unión Industrial Argentina.
Agregó que no serían los empresarios los únicos involucrados en la presión. Los radicales y, en especial, Ernesto Sanz, socio de Pro y cercano al universo empresarial, también habrían mostrado su malestar con la intransigencia de la directiva macrista.
A la espera de una novedad de estas gestiones para comunicar a su tropa, Massa postergó para el lunes la reunión que tenía prevista para hoy con sus intendentes y legisladores. "Sergio canceló toda la agenda. Va a apagar los teléfonos y tomar una decisión. El lunes hablará con los intendentes y el martes daremos una conferencia", indicaron los voceros de Massa, señaló La Nación.