La presidenta Cristina Fernández abordó durante su discurso de apertura de sesiones ordinarias del Parlamento el atentado a la AMIA y todas sus implicancias, incluida la acusación contra su persona que realizó el jefe de Unidad de Investigación del crimen Alberto Nisman antes de morir en circunstancias que se investigan, el domingo 18 de enero, y que fue desestimada en la última semana por el juez federal Daniel Rafecas.
"Lamento su muerte como lamento la muerte de cualquier argentino y cualquier ser humano", dijo la mandataria sobre el destino de Nisman en el inicio de la referencia al tema al frente de la Asamblea Legislativa.
La Presidenta hizo una férrea defensa del memorándum que su Gobierno firmó con Irán para crear una Comisión de la Verdad que pudiera tomarle declaración a los iraníes acusados por el atentado a la AMIA. Por ese acuerdo, Nisman la consideró encubridora de los presuntos autores intelectuales de la voladura de la mutual.
Sobre el fallo de Rafecas que desestimó la denuncia de Nisman y la posterior imputación del fiscal Gerardo Pollicita, manifestó: "Quiero decir que leí profundamente tanto la denuncia como la sentencia del juez: la sentencia de Rafecas habla por sí sola".
Cristina dedicó además un largo análisis sobre la aparición de dos documentos hallados en la caja fuerte de Nisman tras su muerte. Allí había un documento que contrastaba con la denuncia presentada. Ellos fueron entregados por una de las secretarias de la Unidad Fiscal AMIA.
"Esos dos documentos dicen exactamente lo contrario a lo que dice su denuncia. La denuncia debería ser recaratulada y llamarse Nisman vs. Nisman. Porque... ¿a qué Nisman le creo: al que presentó la denuncia o al que me felicitaba? ¿Con qué Nisman me quedo? ¿Con el que nos acusa de encubrimiento o el que se dirigía hacia mí y reconocía todo lo que habíamos hecho?”, remarcó la mandataria.
"Allí el fiscal reconoce que si bien el memorándum de entendimiento con Irán no es lo mejor, persiguió el objetivo de lograr que los acusados se sienten frente al juez de la causa en Teheran a ser indagados. Porque si no hay indagatoria, no hay causa. Y este gobierno fue el único que logró que el Gobierno de Irán firme algo sobre la causa AMIA. Surgen dos documentos. Uno es el público donde dice que encubrimos. A nosotros, que fuimos los que desde 1996 avanzamos con esta causa", agregó.
Cristina también se refirió al contexto geopolítico en el que se produjo el atentado y la investigación posterior: "Nadie va a invadir a Irán porque le hemos pedido a Estados Unidos que incluya el tema AMIA en las negociaciones con Irán. Pusimos al fiscal Nisman al frente de la causa y le dimos todos los elementos. Yo misma me desgañité gritando en la ONU para que cooperen para que el juez les tome declaración a los acusados. El 10 de diciembre va a haber otro presidente y puede ir al Consejo de Seguridad de la ONU. A lo mejor tiene suerte y no lo vetan".
La mandataria criticó a la opsición: "Muchas veces el contacto constante con la política genera que un fiscal de la Nación que acusa a la Presidenta de la República sostiene que este país que sufrió el atentado a la AMIA es el que va a encubrir a Irán que es el que está acusado. Eso no es justicia. Es un bochorno y no para el Gobierno sino para todos los argentinos".
Y, para finalizar, dejó una pregunta: "¿Qué pasó entre que el fiscal se tomó vacaciones y luego presentó la denuncia? En estos momentos Estados Unidos está negociando con Irán un acuerdo nuclear... ¿Nadie une las cosas? ¿Nadie puede pensar un poco más allá de lo que dice Clarín? No podemos seguir manoseando a las 85 víctimas. Y de paso recordar que hubo otro atentado que fue el de la Embajada de Israel y nadie pide justicia por ellos".
Respuesta a los opositores que colgaron carteles con una consigna por AMIA
"A los que me ponen cartelitos para que hablen de la AMIA, sepan que de la AMIA hablo desde el año 1994. En el año 1996 denuncié al juez Galeano y a todos los que encubrieron el atentantado", dijo la Presidente en el inicio de su alocución sobre el tema AMIA cuando percibió que en bancas opositoras se habían colocado carteles con referencias a la mutual judía volada hace 21 años en un atentado.
La mandataria denunció que en los tribunales argentinos "se quiere demorar el juicio de encubrimiento" contra los ex funcionarios acusados de intentar encubrir el ataque terrorista que dejó 85 muertos en 1994.
Recordó además que "han pasado 21 años y no tenemos un solo condenado" por el ataque. "No hay ni un solo preso por AMIA. No necesito carteles. Yo puedo ir con carteles al frente de la AMIA para decirles también que un ex presidente de la DAIA, Rubén Beraja, es un encubridor y vaciador de bancos. Traicionó a su religión y a su asociación. Así que no me vengan a hablar a mí de la AMIA", desafió.
A continuación, Fernández se refirió el ataque contra la embajada de Israel que dejó 29 muertos en 1992. "Ese fue un territorio israelí. Siempre me ha llamado poderosamente la atención. Todavía no puedo entender por qué el estado de Israel reclama por la AMIA y no por la voladura de su propia embajada", apuntó.
También fue blanco de sus críticas la Corte Suprema de Justicia, tribunal a cargo de la investigación del ataque porque se trata de un territorio israelí en este país. "¿Alguien puede informarle a esta Presidenta cuál es el resultado de la investigación o quiénes son los condenados?", se preguntó. En su palco, el titular del máximo tribunal de Justicia, Ricardo Lorenzetti, no pudo contener su gesto de asombro.
